El domingo 16 de junio se estrenará la esperada segunda temporada de “La Casa del Dragón”, la serie precuela de la icónica “Juego de Tronos”. Sin embargo, lo que prometía ser una celebración del universo de George R.R. Martin en México, se ha convertido en un foco de controversia en la CDMX debido al Castillo de Chapultepec.
De acuerdo a la información que brinda Infobae, la promoción de la serie, que incluyó una espectacular representación del Castillo de Chapultepec decorado con banderas de la casa Targaryen, ha generado un fuerte revuelo.
Esta iniciativa, realizada mediante inteligencia artificial, ha sido objeto de críticas y acciones legales por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), desatando un escándalo que ha capturado la atención del público y de los medios.
¿Qué pasó con el Castillo de Chapultepec y La Casa del Dragón?
Como parte de la campaña promocional en México, la plataforma MAX lanzó un clip publicitario en el que se puede ver el emblemático Castillo de Chapultepec, en la Ciudad de México, adornado con banderas de la casa Targaryen.
Esta familia, liderada por la reina Rhaenyra, es un elemento central en la narrativa de la serie. Las imágenes del castillo con los estandartes de la casa Targaryen fueron generadas mediante inteligencia artificial.
La reacción de los fans de “La Casa del Dragón” y el INAH
La reacción de los fans fue inmediata y mayoritariamente positiva. Muchos elogiaron la creatividad de la promoción, destacando la impresionante integración de los elementos de la serie con uno de los monumentos más icónicos de la CDMX. Sin embargo, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) no compartió el entusiasmo.
En un comunicado oficial, el INAH anunció que tomaría medidas legales contra los responsables del uso de las imágenes del Castillo de Chapultepec. El INAH argumentó que se trataba de un uso indebido de imágenes de un monumento histórico.
La Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos de México establece que para la reproducción de monumentos con fines comerciales se requiere un permiso del instituto competente.
Según la ley, “para la reproducción de monumentos arqueológicos, históricos o artísticos, con fines comerciales, se requerirá permiso del Instituto competente, y en su caso se estará a lo dispuesto en la Ley Federal de Derechos de Autor”. En este caso, parece que el departamento de marketing de MAX no obtuvo dicho permiso.
El INAH citó la falta de autorización como base para su acción legal: “Por esta razón, la Coordinación Nacional de Asuntos Jurídicos del INAH llevará a cabo las medidas legales conducentes, debido a que se trata de un uso indebido de imágenes de un monumento histórico”.