Mazatlán, Sinaloa.- Haber vivido el eclipse total de Sol de este 8 de abril de 2024 tiene muchos significados, algunos metafóricos, otros más poéticos. La ciencia busca respuestas en él. Algunos sólo se asoman por la curiosidad, otros asocian el fenómeno con momentos de encuentro y reflexión. Por eso, para aquellos que saben, es un momento propicio para la divulgación. Lo cierto es que un fenómeno como éste nunca pasará desapercibido.
“Observar el eclipse nos conecta, nos recuerda que somos parte del mismo universo y cuando pase nuestro tiempo en la Tierra, nos convertiremos en ese mismo polvo de estrellas. Y es que son realmente contadas las veces que la naturaleza nos ofrece un espectáculo en el que miles de personas podemos ser testigos de él al mismo tiempo”, comparte Fernando Proaño, quien, como muchas otras personas, se dio cita la mañana del lunes para el avistamiento en el puerto mazatleco.
Agrega que si bien es cierto que un fenómeno como el eclipse nos demuestra lo efímera que es nuestra vida, si se compara con la edad del Universo, estar hechos del mismo material que los astros que admiramos nos inmortaliza en el tiempo y nos recuerda que “vivir es importante, no por el tiempo que estamos aquí, sino por las huellas que dejamos en los otros”.
Para Jade, una niña de 10 años, es un día muy especial. “Mis papás me levantaron temprano, y el mar ya se veía muy bonito, me dijeron que el cielo se iba a oscurecer y que íbamos a poder ver directamente sin los lentes por cuatro minutos. Y sí fue muy bonito, algo impresionante, hizo mucho frío, el clima cambió, las aves volaron y todos guardaron silencio, todo se oscureció. Mis amigos no están aquí, pero todos lo iban a ver desde su terraza, desde sus patios o en el malecón. Nosotros vinimos a la Facultad de Ciencias del Mar. Aquí está muy padre, hay mucha gente y científicos. También traje mis lentes, un invento muy chido y útil porque sin ellos no hubiera podido voltear a ver el eclipse”.
Y la noche más atípica llegó
Mazatlán es una de las pocas regiones del planeta donde se pudo observar de manera precisa la alineación de la Tierra, la Luna y el Sol, fue un momento único y majestuoso. “El Eclipse comenzó exactamente a las 10:51 hora local, tuvimos momentos para observarlo de manera parcial, es decir, la Luna comenzó a meterse entre el Sol y la Tierra. A las 11:07, desde este punto de la Tierra, la Luna atravesó totalmente el disco solar”, explica la Dra. Giannina Dalle Mese, miembro del Comité Nacional de Eclipses México.
Comparte que este eclipse es “una bella consecuencia” de la dinámica constante de nuestro sistema solar. “Los cuerpos están en movimiento, la Tierra, la Luna, el Sol. Estábamos ansiosos por observar este momento y que llegara a la totalidad”.
A simple vista, desde este centro operativo donde se reunió parte de la comunidad científica, observamos a las aves volar hacia su isla de descanso, donde los científicos colocaron cámaras para investigar el comportamiento de algunas especies.
Otros especialistas, desde este sitio, observaron la cantidad de radiación generada durante el fenómeno. “El Sol es una estrella, y todas las estrellas expulsan material, eso es normal, por eso se afectan las comunicaciones. La idea es ver qué tanto se bloquean las partículas antes, durante y después de la totalidad. Son datos a gran escala de lo que puede suceder durante un eclipse total”, detalla Giannina Dalle Mese en el acto.
Para ella y sus colegas es un momento que concluye con éxito. “Ciclos de conferencias, capacitación, elaboración de material informativo y educativo, el trabajo de casi tres años hoy culminó. Fue un trabajo en todo el país y estamos muy felices”.
La científica pidió que sigamos siendo observadores, que sigamos preguntándonos: “¿por qué las mareas son altas, por qué el cielo es azul, por qué el atardecer es anaranjado, por qué suceden cosas a nuestro alrededor? Y tratemos de seguir buscando las respuestas”.
Un ejemplo de divulgación
Carlos Brun, profesor de Rootland School, junto con Guadalupe Pérez y Alberto Tripp, viajaron desde la Ciudad de México para realizar una transmisión en vivo para sus estudiantes. Explica que como su escuela tiene niños de kínder y primaria, le pareció una buena idea, aprovechando que él es originario de Mazatlán. “Me pareció lindo decirle al equipo de docentes que, aprovechando la visita a mi familia, podría quedarme un día más y transmitir el suceso, de manera segura, a los peques en la capital mexicana”.
Para los niños, añadió, un fenómeno como éste es impresionante e inédito, y es importante acercarles estas experiencias. “Trajimos herramientas amateur. Soy aficionado a la astrofotografía, tengo un poco de equipo y con eso transmitimos acciones y experimentos cortos para ellos”, señaló.
Con cámaras de fotografía, un lente telefoto, un micrófono, un telescopio y unos binoculares, se logró la transmisión. El profesor Brun asegura que la idea es que los niños también vean que se puede hacer este tipo de actividades, con cosas de reciclaje, soluciones propias y mucha creatividad, para que, en un futuro, tal vez en marzo de 2052, ellos sean quienes transmitan a las nuevas generaciones lo bello e importante de este fenómeno.
La cita para el próximo eclipse
El 30 de marzo de 2052:
Sucederá el siguiente eclipse total de Sol en México
Será visible en su totalidad en:
Nayarit, Zacatecas, Aguascalientes, San Luis Potosí y Tamaulipas
Planetas y un cometa
Al menos los astros Marte, Saturno y Júpiter pudieron apreciarse como puntos luminosos en el cielo. También el llamado “cometa diablo” se pudo observar surcando el cielo durante la penumbra.