Starr Stauffer Wise tiene 75 años y vive en Colorado Springs. Es viuda y, tras retirarse, decidió que ya era momento de cumplir uno de los sueños de su vida: ser bailarina de pole dance.
El diario británico The Sun contó la historia de Stauffer. Ella leyó un artículo sobre Diane Martin, quien empezó a practicar pole dance cuando tenía ya más de 50 años y después comenzó a enseñar a otros. Eso decidió a Stauffer, quien en febrero de 2021 comenzó a tomar clases.
“Cuando leí ese artículo, estaba más que emocionada”, dijo Stauffer a The Sun. “Me hizo revivir un viejo sueño que estuvo en mi lista de cosas por hacer por años, pero que de algún modo arrinconé”.
Aunque primero tenía dudas sobre si podría practicar un deporte de alta intensidad, con el historial médico que tiene -incluyendo artritis reumatoide y osteoporosis-, decidió intentarlo. Se comunicó con la compañía de Martin, Pole Revolution, y le preguntó si había restricción de edad. Cuando le dijeron que no, se apuntó de inmediato, cuenta The Sun.
“No sabía si podría hacerlo a mi edad, con mi historial médico, pero no solo lo hice, sino que me enganché totalmente. No era suficiente, así que m
Stauffer no sólo se divierte tomando tres clases a la semana, sino que afirma que el pole dance la ayudó a lidiar con su ansiedad y la transformó físicamente. También la ayudó con su problema de alcoholismo, aunque lleva ya 36 años sobria.
La abuelita afirma que el pole dance le ayuda a “concentrarse” y que “que se vayan todas esas cosas malas de mi cerebro”.
Además del pole dance, Stauufer también practica zumba, EGym y Silver Sneakers.
Pole dance, “la experiencia más maravillosa”
Dice que cumplir su sueño implicó que algunos de sus amigos y familiares le dieran la espalda, al no comprender por qué quería practicar pole dance. Sin embargo, afirma tener nietas “postizas” -no tuvo hijos propios-, que la apoyan por completo.
“La que vive en California vino a mis dos actuaciones en Los Ángeles. Tiene dos hijas, mis tataranietas postizas, y les parece estupendo lo que hace su Nana”, explica a The Sun.
Incluso sus compañeras de instituto están impresionadas con la fuerza y agilidad de esta mujer de 75 años, ya que algunas de ellas “apenas pueden levantarse de una silla”, explica. La mujer se ha presentado ya en el Comedy pole Show de Los Ángeles.
A pesar de que hay gente que le hace comentarios desagradables, Stauffer asegura que el pole dance ha sido “la experiencia más maravillosa” y que ha hecho nuevos amigos. “¡Vaya sueño! ¡Vaya vida!”, concluye.