Ismael Villagómez, fotoperiodista de El Heraldo de Juárez, fue asesinado la madrugada de este jueves en la colonia Fronteriza Alta de Ciudad Juárez, en Chihuahua. El cadáver del reportero fue encontrado dentro de su coche con una herida de bala en el ojo izquierdo, según ha informado la Fiscalía General de ese Estado.
Las autoridades han detenido este viernes a tres presuntos responsables del asesinato, Juan Eduardo “C”, Carlos Miguel “H” y Jesús Adrián “C”, a quienes además encontraron en posesión de cocaína y varias armas, según informa la agencia Efe. Una de ellas sería la pistola nueve milímetros con la que dispararon al periodista.
Villagómez trabajaba como reportero gráfico y complementaba su salario como conductor de una plataforma, algo muy habitual. Muchos periodistas y fotógrafos en México se ven obligados a tener más de un trabajo debido a los bajos sueldos que reciben y las malas condiciones en las que trabajan. Aunque las autoridades todavía no descartan ninguna hipótesis, cobra más fuerza en las últimas horas que los tres hombres atacaran a Villagómez para robarle después de contratar sus servicios como chofer.
En el forcejeo, uno de los supuestos asesinos se dejó el teléfono móvil y una credencial de elector con la que las autoridades han podido ubicarle en cuestión de horas, según la última actualización del caso. Al periodista le robaron la cartera y dos celulares. La Fiscalía podría presentar este viernes a los detenidos ante un juez para tratar de establecer una imputación y la correspondiente vinculación a proceso.
El cuerpo de Villagómez fue encontrado en torno a las 1.53 de la madrugada en el asiento del copiloto con una herida de arma de fuego. La policía local fue la primera en llegar al lugar de los hechos gracias a la llamada de los vecinos al 911, quienes alertaron del ataque entre las calles Artículo 27 y Sinaloa.
El ataque al reportero se suma a una larga lista de comunicadores asesinados durante los últimos 20 años en México, uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo del mundo, según Reporteros Sin Fronteras. Cada 13 horas se calcula que hay un ataque contra la prensa en el país y Chihuahua es uno de los Estados más peligroso para ejercer la profesión. Desde 2000 han sido asesinados 162 periodistas, de acuerdo a Artículo 19, una organización defensora de los derechos humanos y la libertad de expresión. Villagómez es, tristemente, el periodista 163. Solo en lo que va de año, ocho reporteros más han sido asesinados en México.
Apenas la semana pasada, México acogió la Asamblea General anual de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), que aseguró en un informe que la violencia sigue siendo “la principal amenaza” para el periodismo en el país este 2023, además de denunciar el “discurso hostil” del presidente Andrés Manuel López Obrador.