Culiacán, Sin (RI Noticias).-El Coordinador del Consejo Estatal de Seguridad Pública (CESP), Miguel Calderón Quevedo, hizo un enérgico llamado a las autoridades para tomar medidas urgentes ante el colapso del sistema penitenciario en Sinaloa y en todo el país, calificándolo como “obsoleto y altamente vulnerable”.
Asimismo comentó que está por cerrar un ciclo anual en medio de una crisis que ha alterado profundamente nuestra cotidianidad y ha impactado la paz colectiva.
A su vez comentó que desde el Consejo Estatal de Seguridad Pública, como organismo ciudadano con más de 30 años observando las políticas de justicia desde la sociedad civil, han señalado de forma constante, durante décadas, que nuestro sistema penitenciario es obsoleto.
“Lamentablemente, los hechos recientes así como antecedentes históricos confirman esta realidad y evidencian la urgente necesidad de mejorar el sistema. Tal vez no baste con ajustes menores; es posible que se requiera una transformación estructural”, dijo
En ese sentido y a raíz de los eventos ocurridos el día de ayer en el penal de Aguaruto dijo han retomado y actualizado las recomendaciones que ya habían presentado en el pasado, sin embargo en esta ocasión, hacemos un llamado puntual y urgente a reubicar a las personas privadas de la libertad catalogadas como altamente peligrosas.
Afortunadamente, dijo, el gobernador ha sido receptivo ante esta propuesta concreta, y confiamos en que con su respaldo pueda iniciarse el proceso de reubicación de manera inmediata.
En entrevista telefónica para RI Noticoas, también destacó la necesidad de cerrar de forma definitiva el penal de Aguaruto, el cual ha sido calificado como “poroso” y sin condiciones mínimas de seguridad, permitiendo incluso la circulación de armas y sistemas de comunicación no permitidos.
“Estamos hablando de personas altamente peligrosas. Ya lo habíamos advertido en ocasiones anteriores. Esto no es nuevo”, declaró.
Añadió que ya se han sostenido conversaciones con expertos y autoridades para evaluar alternativas, entre ellas la reubicación de reos de alto riesgo.
El coordinador del CESP también hizo referencia a antecedentes similares, como el caso del penal de Topo Chico, Nuevo León en 2016, donde hubo víctimas mortales.
En su opinión, los sistemas penitenciarios de Ahome y Mazatlán también deben ser revisados a fondo y orientados hacia la reinserción social, especialmente para quienes cumplen condenas por delitos menores.
Calderón lamentó que, aunque existe la intención de reubicar a ciertos internos, en los últimos dos años las reformas al sistema de justicia han fortalecido los derechos de los reos, dificultando estas acciones mediante amparos.
“Debemos buscar el equilibrio entre los derechos humanos y la seguridad pública”, subrayó.
Finalmente, hizo un llamado a invertir de manera decidida en infraestructura, tecnología y personal para garantizar un sistema penitenciario funcional y seguro.
“No podremos aspirar a una Sinaloa en paz si no atendemos este tema con seriedad. Es urgente actuar”, concluyó.