El cónclave 2025, el tercero en lo que va del siglo siglo, inició este miércoles 7 de mayo en la Capilla Sixtina del Vaticano, con el primer resultado de una fumata negra.
La fumata negra salió por la chimenea instalada en la Capilla Sixtina en punto de las 21:00 h local (13:00 h tiempo del Centro de México).
El humo salió por la chimenea durante un buen rato, con el objetivo de que no hubiera dudas de que era de color negro.
No se espera otra votación para este 7 de mayo por parte de los cardenales electores.
Lo anterior ocurre poco más de tres horas después de que los 133 cardenales electores se encerraran en punto de las 17:46 h local en iniciar con la elección de un nuevo papa, quien sucederá a Francisco, muerto el 21 de abril.
Los portones de madera de la Capilla Sixtina, custodiados por dos guardias suizos con alabardas en punto de las 17:46 h local.
El maestro de Celebraciones Litúrgicas, Diego Ravelli, pronunció la fórmula en latín, “Extra omnes” (fuera todos), para pedir a todo aquel ajeno al cónclave que abandonara la capilla.
En su interior quedaron los purpurados electores con el predicador capuchino Raniero Cantalamessa, que será el encargado de pronunciar una meditación antes de salir de la capilla y dejarlos solos.
A partir de ese momento los 133 cardenales llamados a votar por tener menos de 80 años quedaron encerrados para elegir al nuevo pontífice.
El nuevo líder de la Iglesia católica deberá reunir al menos 89 votos, lo que representados tercios de los 133 electores totales.
Los purpurados saldrán de la Capilla Sixtina para cenar y dormir, pero siempre dentro del territorio vaticano, menos de medio kilómetro cuadrado en el centro de Roma, pues tienen prohibido abandonarlo o comunicarse con el exterior so pena de excomunión.
En la plaza de San Pedro, se congregaron miles de personas en espera de la primera votación del cónclave.
