Mazatlán, Sinaloa. (RI Noticias).- En un esfuerzo por mejorar la resiliencia hídrica de la ciudad, Sandra Guido, Directora Ejecutiva de Conselva, presentó una serie de propuestas ante la Alcaldeza Estrella Palacio para asegurar el abastecimiento de agua en el futuro. Durante la reunión, Guido destacó la importancia de implementar medidas preventivas que mitiguen posibles riesgos a largo plazo.
Guido subrayó que, aunque Mazatlán no enfrenta una crisis hídrica inmediata, es fundamental actuar proactivamente. “El agua es un recurso vital y su manejo debe ser preventivo para asegurar el futuro de la ciudad”, señaló.
Una de las principales preocupaciones que abordó fue el suministro de agua proveniente de la presa Picachos, que abastece a Mazatlán con una capacidad de 322 millones de metros cúbicos anuales. De estos, 94.6 millones de metros cúbicos se destinan al consumo urbano. Sin embargo, el caudal del río Presidio, principal fuente de la presa, ha disminuido un 56% en los últimos 13 años debido a la sequía y a la construcción de presas en Durango. Actualmente, las demandas de agua exceden la capacidad de la presa, generando un déficit de 115.92 millones de metros cúbicos.
Guido también alertó sobre los problemas derivados de la sobreexplotación del acuífero local, donde ya en 2018 existían 425 pozos de extracción para uso agrícola, una cifra que no ha sido actualizada desde entonces. Esta sobreexplotación podría causar intrusión salina, un fenómeno irreversible que afectaría aún más los recursos hídricos.
En respuesta a estos desafíos, las propuestas incluyen la reforestación de cuencas, la implementación de sistemas de reciclaje de agua y la regulación de los pozos para prevenir la sobreexplotación.
Además, Guido destacó la necesidad urgente de crear mecanismos legales que protejan las zonas de aportación de agua del río Presidio hacia la presa Picachos. En este contexto, hizo un llamado a las autoridades municipales para considerar la creación de un área natural protegida municipal que abarque las principales micro cuencas captadoras de agua. Esta propuesta incluiría la incorporación de estas zonas en un programa de ordenamiento ecológico local con un enfoque de cuenca, con el objetivo de garantizar la conservación y la sostenibilidad a largo plazo de los recursos hídricos de la región.