Hace 75 años, en el Mundial de Brasil de 1950, la Selección Mexicana protagonizó un momento único al usar la camiseta del Gremio de Porto Alegre en su enfrentamiento contra Suiza. En ese entonces, ambos equipos tenían uniformes de un color similar, guinda, lo que causó la necesidad de un cambio de indumentaria. El 2 de julio de 1950, bajo la dirección de Octavio Vial, México ganó un volado pero cedió cortesmente el uso de su uniforme original a Suiza, optando por la camiseta del Gremio.
A pesar de este gesto, México no logró la victoria y cayó 2-1 frente a los suizos, con goles de René Bader y Charles Antenen para Suiza, y Horacio Casarín para México. Este partido marcó el final de una participación decepcionante en el Mundial, donde México no obtuvo ninguna victoria, recibiendo diez goles y anotando solo dos. Previamente, el equipo había perdido contra Brasil (4-0) y Yugoslavia (4-1).
Regreso a Porto Alegre
Setenta y cinco años después, México vuelve a Porto Alegre, no solo para recordar este suceso histórico, sino para enfrentarse al Inter de Porto Alegre en un partido amistoso. Este encuentro forma parte de una gira sudamericana del Tri, que continuará con un enfrentamiento contra River Plate en el Estadio Monumental de Buenos Aires el próximo martes 21 de enero.
Este partido amistoso es una oportunidad para que México reviva y celebre su conexión histórica con Porto Alegre, a la vez que se prepara para futuros compromisos internacionales.