Maztlán, Sin.- (RI Noticias) -El sistema lagunar El Huizache-Caimanero, un emblema histórico de la pesca en Sinaloa, enfrenta una grave crisis debido a la falta de agua dulce, un recurso esencial para la reproducción y desarrollo del camarón. Esta problemática pone en riesgo la fuente de ingresos de más de 5,000 pescadores que dependen directamente de la actividad en esta región.
Gilberto Palafox Uzeta, presidente de la Federación de Cooperativas Pesqueras “Unidos de la Laguna del Caimanero”, explicó que la temporada ha sido particularmente difícil, con reportes de una producción prácticamente nula. “Ni una cola de camarón se logró este año. Todo se perdió por la falta de agua dulce”, comentó.
Aunque el gobierno estatal ha brindado apoyo económico al sector, entregando recursos que sumaron más de 25 millones de pesos en todo el estado (de los cuales 2.28 millones se asignaron a 10 cooperativas en el sur), los pescadores subrayan que estas medidas son paliativas y no resuelven el problema estructural.
Entre los factores que han agravado la crisis se encuentran el ensolvamiento del sistema lagunar, la contaminación atribuida a diversas actividades industriales como laboratorios y deshidratadoras de mango, así como los efectos de un espigón en la boca barra del Baluarte, una estructura cuya presencia ha generado impactos negativos durante más de tres décadas.
“Sin agua dulce estamos perdidos”, enfatizó el líder pesquero, señalando que la rehabilitación del sistema lagunar también es crucial. Además, destacó la necesidad de un trabajo conjunto entre los gobiernos federal y estatal para garantizar la llegada de agua desde las presas Santa María y Picachos.
El gobernador ha manifestado públicamente su compromiso con la entrega de agua dulce al sistema, lo que ha sido recibido con esperanza por los pescadores. Sin embargo, los líderes del sector pesquero insisten en que es fundamental continuar gestionando con las autoridades para garantizar soluciones a largo plazo.
La crisis afecta no solo a los pescadores, sino también a las comunidades que dependen indirectamente de esta actividad, como laboratorios, empaques y comercializadores. “De nada sirve rehabilitar el sistema si no hay agua dulce, y de nada sirve el agua si el sistema sigue deteriorado”, explicó Palafox Uzeta, haciendo un llamado a una estrategia integral.
A pesar de los retos, los pescadores agradecen el apoyo brindado por el gobernador Rubén Rocha Moya ha sido fundamental para enfrentar esta difícil situación. Este respaldo les permitió cubrir parcialmente algunas deudas y mantener la operatividad de las cooperativas, lo que consideran un alivio en medio de una temporada especialmente adversa.