A los diez años, Tadeo, originario de Ciudad Juárez, Chihuahua, celebró el logro más importante de su vida: vencer el cáncer. Diagnosticado con xantogranuloma juvenil, un trastorno poco frecuente que afecta a las células del sistema inmunológico, el pequeño enfrentó un largo camino de tratamientos para superar esta enfermedad que inició con lesiones en su piel y la cual dejó atrás oficialmente en Torreón.
El xantogranuloma juvenil generalmente se presenta como uno o más nódulos de color rojizo o amarillento, ubicados principalmente en la cabeza y el cuello, y suele manifestarse durante el primer año de vida. Aunque en la mayoría de los casos las lesiones son autolimitadas y no requieren tratamiento, Tadeo enfrentó una forma atípica que demandó un abordaje más intensivo.
El oncólogo pediátrico Luis Peraza Martínez explicó que, en el caso de Tadeo, las lesiones comenzaron a invadir su piel, lo que llevó al equipo médico a realizar una biopsia para confirmar el diagnóstico y diseñar un tratamiento específico. Durante un año, el menor recibió quimioterapia, seguido de cuatro años de vigilancia médica constante.
“Mi hijo es un guerrero”, asegura la mamá de Tadeo:
Este jueves 19 de diciembre el Hospital Infantil Universitario se llenó de alegría cuando Tadeo tocó la campana que simboliza la victoria contra el cáncer. “Fueron años muy difíciles”, comentó Aracely Solís, madre de Tadeo, quien recordó que la pandemia y las restricciones añadieron desafíos al tratamiento de su hijo. “A pesar de todo, él siempre fue un guerrero”.
Aracely destacó que además del cáncer, Tadeo también vive con autismo, lo que complicó aún más el proceso médico. Sin embargo, su fortaleza y el apoyo del equipo médico y de otras familias del hospital fueron fundamentales para superar esta etapa.
La enfermedad que superó Tadeo es muy rara
El doctor Peraza Martínez subrayó que el xantogranuloma juvenil es una enfermedad extremadamente rara. “Hablamos de una incidencia de cinco o seis casos por cada millón de personas. Es una variante de las histiocitosis que afecta las células dendríticas”, explicó el especialista.
En su mensaje, la madre de Tadeo expresó gratitud hacia el personal del hospital y dedicó este logro a todos los niños que aún luchan contra el cáncer.
“Este día lo soñamos mucho. Es un símbolo de esperanza para quienes siguen en este camino”.
Tadeo es uno de los cinco niños que este año lograron tocar la campana en el Hospital Infantil Universitario, un recordatorio de que la lucha contra el cáncer puede ser difícil, pero no imposible.
¿Qué es el xantogranuloma juvenil que padeció Tadeo?
El caso de Tadeo no solo es un ejemplo de valentía, sino también una oportunidad para comprender una enfermedad poco frecuente: el xantogranuloma juvenil. Este trastorno pertenece al grupo de las histiocitosis de células no Langerhans, un término que puede sonar complicado, pero que básicamente significa que afecta a un tipo de células del sistema inmunológico llamadas histiocitos, distintas de las conocidas como células de Langerhans.
En palabras simples, el xantogranuloma juvenil se manifiesta como pequeños bultos o nódulos en la piel, que suelen ser rojizos o amarillos. Aunque generalmente es una enfermedad benigna y las lesiones cutáneas no requieren tratamiento, en casos raros puede afectar otras partes del cuerpo, como los ojos, lo que requiere una evaluación médica más detallada.
La vida de Tadeo cambió, pero supo superar la enfermedad
En el caso de Tadeo, el diagnóstico fue realizado tras una biopsia de piel, un procedimiento en el que se analiza una muestra de tejido para confirmar el tipo de enfermedad. Aunque en la mayoría de los casos esta condición no requiere tratamiento específico, el caso de Tadeo presentó complicaciones que llevaron a los médicos a optar por quimioterapia y medicamentos especializados.
“El xantogranuloma juvenil es extremadamente raro. En este caso, decidimos tratarlo con quimioterapia porque las lesiones comenzaron a extenderse y afectar la piel de manera significativa”, explicó el oncólogo pediatra Luis Peraza.
A pesar de las dificultades, la historia de Tadeo y su familia nos deja una gran enseñanza: con el tratamiento adecuado, un diagnóstico temprano y el apoyo de especialistas, es posible superar hasta las enfermedades más raras. Como expresó su madre, Aracely Solís:
“Este logro no es solo de Tadeo, sino de todos los niños que luchan contra estas enfermedades. Cada campanazo que da un niño significa esperanza para los que todavía están luchando”.