Culiacán, Sinaloa.- (RI Noticias) Marte Nicolás Vega Román, presidente de la Confederación de Asociaciones Agrícolas del Estado de Sinaloa (CAADES), hizo un llamado urgente para atender la pérdida de autosuficiencia en la producción de frijol y garantizar la estabilidad en el cultivo de maíz blanco, pilares de la canasta básica donde Sinaloa desempeña un rol estratégico.
Vega Román destacó que Sinaloa ha experimentado una drástica reducción en la producción de maíz blanco, pasando de 6 millones de toneladas anuales en años recientes a menos de 2 millones estimadas para el ciclo actual. En el caso del frijol, la pérdida de autosuficiencia durante 2023 ha encendido las alarmas en el sector agrícola.
“Calculamos que este año habrá entre 130 mil y 140 mil hectáreas sembradas de maíz, un volumen muy bajo que afectará directamente a la industria de la masa y la tortilla”, explicó el dirigente.
El líder agrícola criticó el recorte de 400 millones de pesos al presupuesto federal para el campo comercial, lo que, según él, limitará los programas de apoyo al sector. Vega Román señaló que los actuales enfoques en políticas públicas son insuficientes para resolver los problemas de productividad.
“Con los mismos programas y montos autorizados, los resultados no cambiarán. Necesitamos priorizar la producción de alimentos básicos y trabajar de la mano con las autoridades”, afirmó.
Sobre la participación de productores sinaloenses en la iniciativa de reducción del precio de la tortilla, Vega Román aclaró que el costo del maíz, a pesar de haber disminuido, no se refleja en el precio final al consumidor.
El presidente de CAADES, acompañado por Enrique Rodarte Espinoza de los Monteros y Enrique Riveros Echavarría, advirtió que áreas fundamentales como la sanidad agrícola, la investigación y la comercialización de granos han sido relegadas.
“Estas áreas son clave para la sostenibilidad del sector. Si las dejamos de lado, comprometeremos la producción actual y futura, poniendo en riesgo la seguridad alimentaria del país”, puntualizó.
La caída en la producción de maíz y frijol no solo afecta a Sinaloa, sino a todo México. Según datos de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), la producción de maíz ha disminuido un 18% en la última década, obligando al país a importar más granos para cubrir la demanda.
Vega Román hizo un llamado a replantear las políticas públicas, priorizando la inversión en investigación, capacitación y financiamiento, elementos clave para garantizar la autosuficiencia alimentaria en México.