Francisco Labastida, excandidato presidencial priista y exgobernador de Sinaloa (1987-1992), aseveró que la violencia en dicha entidad del país, ocasionada por facciones del Cártel de Sinaloa a raíz de la detención en EE.UU. de Ismael Mayo Zambada, tardará años en resolverse.
En entrevista con Joaquín López-Dóriga para su espacio en Radio Fórmula, Labastida Ochoa señaló al Gobierno de Rubén Rocha por estar coludido con el crimen organizado.
“Muy mal (está Sinaloa, el crimen organizado está) coludido con el Gobierno, por supuesto (…) Es lamentable lo que está ocurriendo en mi tierra”, dijo.
Y no tengo dudas de que algunos de los gobernadores que han llegado a Sinaloa hayan hecho tratos con el narco, no tengo duda, pero creo que es el primero que se auxilia del narco para llegar al poder, es un cambio. Me refiero a Rubén Rocha Moya, por supuesto”, sostuvo.
El excandidato presidencial priista dio algunos ejemplos de la violencia que ocurre en Sinaloa, que influyó en los pasados comicios.
“¿Más evidencia de que uno de los guardaespaldas haya estado acompañando a quien detuvieron y se lo llevaron a EE.UU. (Ismael Mayo Zambada)? ¿Más evidencia? Que el día de la elección hayan secuestrado a 90 gentes en el municipio de Culiacán, entre ellos al director de Acción Política (del PRI), a su esposa y a su madre y que les dieran ‘si ustedes ganan mañana los matamos’”, señaló.
“¿No es evidencia todo lo que hicieron en Ahome, en donde se robaron casillas a más no poder? ¿Y en los municipios de la sierra en donde obligaban a la gente a votar por quienes ellos decían (en referencia al candidato de Morena)?”, destacó.
Labastida Ochoa dejó en claro que es evidente que Rocha Moya “estorba” para implementar la paz en Sinaloa. y apuntó que el nuevo Gobierno federal debe estar consciente de lo que se necesita para acabar con la violencia del crimen organizado.
“Es problema menor (la permanencia de Rocha en el Gobierno estatal), obviamente está estorbando, pero tienen que tener buena información y buena inteligencia, estrategia y reacciones emergentes para problemas emergentes”, expuso.
Deben tener buen instrumento operativo, capacitado y con buen armamento. Deben limpiar las cárceles que están en control del narco. La tarea por realizar es de años, quien subestime el tamaño del esfuerzo que hay que hacer se equivoca”, enfatizó.
Sinaloa vive desde inicios de septiembre una espiral de violencia provocada por facciones del Cártel de Sinaloa, luego de que en julio fuera detenido el Mayo Zambada en un aeropuerto de EE.UU., en Nuevo México.
Esta lucha entre grupos de cártel suma más de 200 asesinatos en dicha entidad desde el 9 de septiembre.