Un adolescente, de 18 años de edad, fue detenido en Venezuela luego de que se descubrió que masacró a toda su familia para poder cobrar una jugosa herencia. El sospechoso, identificado como Héctor Vásquez, presuntamente atacó a sus padres y tíos – el pasado 18 de septiembre dentro de una vivienda en la comunidad de Zulia – con el objetivo de convertirse en el heredero de una fuerte suma de dinero, la cual pretendía cobrar como parte de los seguros de vida de sus familiares.
Sin embargo, el adolescente quedó al descubierto luego de que su declaración presentó varias inconsistencias y las autoridades encontraron las armas que se utilizaron durante el crimen. De acuerdo con el relató a las autoridades venezolanas, fue gracias a las investigaciones dentro de la casa que se logró la detención de Héctor Vásquez, quien ahora enfrentará cargos por los asesinatos de sus padres y su sobrino, quien era un menor de edad al momento del crimen.
Adolescente y su amigo planearon asesinar a la familia por dinero
Las autoridades descubrieron que, días antes del multihomicidio, Héctor le había robado a sus padres la suma de 3 mil dólares (cerca de 60 mil pesos mexicanos) sin que ellos se dieran cuenta. Aparentemente, el adolescente sabía que sus padres tenían más dinero ahorrado y que con su muerte él se haría heredero de una enorme suma de dinero. Por esta razón, el joven habría tomado la decisión de asesinar a sus padres y a su sobrino que estaba en la casa.
Héctor no actuó solo, sino que contaba con el apoyo de uno de sus amigos, otro hombre identificado como Reyber González, quien se sumó al plan con el objetivo de recibir una parte del dinero. Las autoridades revelaron que el sospechoso le disparó a sus familiares en varias ocasiones, pero al percatarse de que su sobrino sobrevivió trató de asfixiarlo con un cable. En el caso del menor de edad, el niño sobrevivió a las balas, pero perdió la vida tras ser estrangulado con el cable.
El joven quería engañar a la policía diciendo que era un sobreviviente
Héctor engañó a las autoridades diciendo que él no había estado en la vivienda al momento de los homicidios. En su declaración, el joven aseveró que su padre lo había enviado a cumplir algunos mandados y que se dio cuenta de lo sucedido hasta que regresó a la vivienda. Sin embargo, pese a sus intentos por engañar a la policía, las autoridades descubrieron inconsistencias en su relato, por lo que lo arrestaron mientras la investigación concluía.
Tras realizar estudios dentro de la casa se determinó que la historia de Héctor tenía varias inconsistencias y se encontró el arma homicida, la cual tenía las huellas del adolescente y su amigo. Tras los hallazgos la policía también arrestó a Reyber González y ambos jóvenes enfrentarán cargos por el homicidio de las tres personas.