Ayer ocurrió el equinoccio de otoño en el hemisferio norte del planeta, un evento astronómico que marca el fin del verano y el inició de la estación preferida para miles de personas, cuando los árboles se tiñen de tonos dorados para dar pie a un agradable clima que anuncia la brisa fría que acompaña el Día de Muertos.
De acuerdo con la NASA, este evento sucede cuando los rayos del Sol iluminan directamente la línea del ecuador, lo que hace que el hemisferio norte y el sur reciban la misma cantidad de luz solar.
Este lunes la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos, compartió un video captado desde el espacio y en donde se observa el momento en el que ocurre el equinoccio de otoño.
El clip fue captado por un satélite durante varios días, consiguiendo imágenes del fenómeno astronómico que dio inicio al otoño, y en donde se observa el cambio del ángulo del sol a lo largo del tiempo debido a la inclinación de la Tierra, lo que da lugar a los cambios de estaciones.
La palabra “equinoccio” proviene del latín, de la palabra original “aequinoctium”, que se descompone en “aequus”, que significa “igual”, y “nox” o “noctis”, que se traduce como “noche”, según la Real Academia Española (RAE).
A partir del equinoccio de otoño las noches comenzarán a hacerse más largas que los días en el hemisferio norte, ya que la luz solar se desplaza hacia el hemisferio sur. Es un cambio hermoso que nos invita a disfrutar de la magia de esta estación del año.
El equinoccio de otoño es un evento astronómico que simboliza equilibrio y cambio. A medida que las sombras crecen y las hojas cambian, nos invita a reflexionar sobre la naturaleza cíclica de la vida y a celebrar las maravillas del universo.
Ya sea mediante festivales, observaciones astronómicas o simplemente disfrutando de la naturaleza, el equinoccio nos conecta con el cosmos y nos recuerda que, a pesar de la rapidez del mundo, siempre hay momentos de equilibrio y belleza en medio de la transición.