El presidente Andrés Manuel López Obrador volvió a lanzarse contra el exmandatario Ernesto Zedillo, tras las críticas hacia su Gobierno tras la promulgación de la reforma al Poder Judicial.
En la conferencia matutina de Palacio Nacional, López Obrador indicó que Zedillo Ponce de León no había hablado durante el sexenio, pero que “ahora se desató” tras la reforma judicial.
“(Adversarios) desatan estrategias con personajes como Zedillo, que no había salido, no había hablado. Se iba con Vargas Llosa y con los pseudo intelectuales del conservadurismo a participar en conferencias internacionales, pero no hablaba de México”, dijo.
Y ahora sí vino y se desató, y así está desatada toda la maleantada, como dicen en mi tierra ‘por algo será’”, indicó.
El mandatario mexicano enfatizó que los dichos del expresidente Ernesto Zedillo es una muestra de que la Cuarta Transformación va por buen camino.
“Esto significa que vamos muy bien con el proceso de cambio, de transformación y que debemos de continuar de esta manera, porque está bien la economía, hay bienestar, se ha avanzado en garantizar la paz y la tranquilidad, porque hemos logrado todos, esta transformación”, indicó.
“Claro, hay quienes no lo ven así, pero tienen el derecho de expresarse, manifestarse, de protestar, disentir, porque eso es la democracia”, externó.
El expresidente de México (1994-2000), Ernesto Zedillo, consideró el domingo que la reforma al Poder Judicial, para elegir a juzgadores por voto popular, busca la destrucción de su independencia para ponerlo al servicio de la fuerza política en el poder.
Zedillo Ponce de León fue el encargado de dar el discurso inaugural de la Conferencia Anual de la Asociación Internacional de Abogados (IBA, en inglés) que se llevará a cabo del 15 al 20 de septiembre en la Ciudad de México.
El expresidente avisó al abrir su discurso y critica a la citada reforma que ponía “en pausa” su determinación de 24 años de no hablar de la política interna de México.
Señaló en su participación que “la frustración del presidente (Andrés Manuel López Obrador) al no contar con una Corte sumisa ha evolucionado hasta transformarse en una venganza brutal: la destrucción de la independencia e integridad del Poder Judicial para que esté al servicio de la fuerza política en el poder”.