En el marco del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, es vital poner en perspectiva el preocupante aumento en las tasas de suicidio en México y su impacto en las juventudes, especialmente en la comunidad LGBTQ+.
Entre 2017 y 2022, la tasa de suicidio en México aumentó de 5.3 a 6.3 por cada 100 mil habitantes, lo que se traduce en 1,629 suicidios adicionales en 2022 en comparación con 2017.
Ante lo anterior, las personas jóvenes, particularmente entre los 20 y 34 años, se encuentran entre las más vulnerables siendo el grupo de 25 a 29 años el más afectado, con males como la depresión detonando estos sucesos lamentables.
En un esfuerzo por abordar las crecientes tasas de suicidio entre las juventudes LGBTQ+ en México, surge Voces y Colores, un proyecto creado para brindar un espacio psicoterapéutico seguro y afirmativo, donde el bienestar emocional y la identidad de cada persona sean valorados y respetados.
Jóvenes de la comunidad han pensado en el suicidio
Para las juventudes LGBTQ+, este escenario es aún más preocupante. La discriminación, el rechazo familiar y la falta de espacios seguros representan factores de riesgo que exacerban su vulnerabilidad.
De acuerdo con la primera encuesta de salud mental LGBT realizada por The Trevor Project México, el 77% de las juventudes LGBTQ+ señaló el rechazo familiar como la principal motivación para un intento de suicidio.
- De los 10 mil participantes de entre 13 y 24 años, más del 57% consideró seriamente el suicidio en el último año, y el 38% lo intentó.
- La situación es aún más crítica entre las juventudes no binarias, de las cuales el 67% consideró el suicidio y el 45% intentó llevarlo a cabo.
Voces y Colores apoya a los jóvenes de la comunidad
Es fundamental que las familias y la sociedad mexicana comprendan que el apoyo incondicional y la aceptación de las juventudes LGBTQ+ no solo son actos de amor, sino también de supervivencia. Marco Romero, Maestro en Medicina conductual destaca:
“La inclusión familiar y social no solo ofrece un soporte emocional invaluable; es un factor protector que literalmente puede salvar vidas. En ‘Voces y Colores’, creemos firmemente que cada persona tiene derecho a ser escuchada y valorada por quien realmente es, sin temor a la violencia o la exclusión”.
Ante esta realidad, Voces y Colores se establece como un refugio esencial para las juventudes LGBTQ+, ofreciendo servicios de terapia individual, grupal y familiar, diseñados para abordar las necesidades específicas de esta comunidad.
Este proyecto, que forma parte de Mental Network, dirigido por Aldo Reyes, Dr. en psicoanálisis, nace de la necesidad de crear un espacio psicoterapéutico seguro, libre de prejuicios y estigmas, donde las juventudes LGBTQ+ puedan encontrar apoyo, sanar y reescribir su historia desde el amor y la aceptación.
Voces y Colores hace un llamado a las familias a estar atentos y ser el soporte que sus hijos necesitan. Con el amor y la comprensión como pilares es posible transformar la vida de las juventudes LGBTQ+ y construir un entorno donde cada joven se sienta seguro y valorado.
“Nuestro trabajo es crear un entorno donde cada joven pueda explorar su identidad con libertad, sanar de experiencias traumáticas, y construir un futuro con esperanza. Queremos que sepan que no están solos, que este es un espacio para la comunidad, hecho por la comunidad”, finalizó América Santos, maestra en psicoterapia.
A través de este proyecto, se busca crear un entorno más inclusivo y compasivo, donde todas las voces y colores sean escuchados y valorados. Para más información, se pueden visitar las redes sociales de Mental Network donde se comparten recursos y actualizaciones sobre el proyecto.