Ricardo Anaya Cortés, senador federal del Partido Acción Nacional (PAN), ha expresado su profunda preocupación por la reforma al Poder Judicial que está siendo impulsada a través del Congreso de la Unión en un proceso acelerado y polémico.
Anaya denunció que la reforma ha sido aprobada en lo general bajo circunstancias anómalas y en una sede alterna, sin los controles adecuados. Además, subrayó que la forma en la que se ha tramitado la reforma es una muestra de la erosión de los contrapesos en la democracia mexicana.
En entrevista, Ricardo Anaya dijo que este debilitamiento podría transformar el régimen democrático en uno de carácter autoritario: “El único contrapeso que quizá queda es el Senado”, afirmó, advirtiendo que la oposición podría ser crucial para bloquear la reforma.
Advierte de control de Morena en el Poder Judicial
Sin embargo, expresó su temor de que incluso la falta de asistencia de uno de los 43 senadores opositores podría permitir que Morena pase la reforma. También destacó que el gobierno ha desviado la atención hacia la propuesta de elección de jueces por el pueblo, cuando el verdadero problema radica en el control que Morena tendría sobre el proceso judicial.
Entre los puntos que Anaya destacó están la preselección de candidatos a jueces por parte de Morena, la confusión y dificultad que enfrentará el electorado al votar, y la creación de un tribunal de disciplina que podría resultar en represalias severas contra jueces independientes.
Anaya señaló que el tribunal de disciplina es una herramienta que podría ser utilizada para intimidar y castigar a jueces que no se alineen con los intereses del gobierno.: “este tribunal está diseñado para someter a los jueces que actúen en contra de las decisiones del gobierno, lo que podría tener un efecto intimidatorio en la independencia judicial”, explicó.
Además, Anaya expresó su preocupación por las posibles consecuencias económicas que podría tener la reforma. Señaló que la falta de certeza jurídica y la inestabilidad en el sistema judicial podrían desalentar la inversión, especialmente en proyectos de infraestructura a largo plazo. Advirtió que esto podría llevar a un deterioro de la economía y afectar la capacidad del gobierno para financiar programas sociales.
El senador del PAN concluyó reafirmando su compromiso con la oposición a la reforma y llamó a los senadores a mantener la firmeza en su posición.