El técnico argentino Diego Cocca, con breve paso por la selección mexicana, habló fuerte de lo que es el entorno dentro del Tri. Aseguró que en el país, por el trato que le dan a los técnicos, no se ve que haya una prioridad sobre el representativo nacional; y se dijo esperanzado de que se le dé el apoyo esperado a Javier Aguirre.
“Hay que darle la prioridad a la selección, es difícil porque en este país la prioridad no la tiene la selección y hay que cambiar mucho la mentalidad, hay que darle tiempo al técnico para hacer rendir a los jugadores. Este país tiene muchos jugadores del medio local y se podría trabajar tranquilamente acá durante la semana, pero no podrían trabajar con sus clubes y habría que sacarlos, nosotros empezamos un proyecto y una idea como esa de tener concentraciones con los jugadores, pero no tuvo tiempo para hacerse. Ojalá le dejen hacer a Javier Aguirre lo que él cree que se necesita y que le den todo el apoyo necesario”.
En entrevista para ESPN, el técnico bicampeón con Atlas ejemplificó dicha situación hablando del sentir de los directivos de los Tigres hacia su persona. Indicó que la gente de los felinos se molestó con él por la decisión de dirigir a la selección, cuando se supone que partía para ayudar a un bien común como es el Tricolor.
“Fíjate lo que me pasó en Tigres, me vinieron a buscar de la selección cuando estaba en Tigres y la gente de Tigres se enojó conmigo, la gente de Tigres dice que yo los abandoné cuando realmente me vinieron a buscar para representar al país donde está Tigres y la gente no lo entiende de esa manera. Hay que entender que es así porque a lo mejor la selección no les da las alegrías que si les da su club, es una manera de sentir y hay que entender a la gente como es. Creo que cuando la selección empiece a darle la alegría a la gente mexicana se volcará hacia su país”.
Por otra parte, descartó que la salida de Jaime Lozano de la selección haya sido similar a la suya; ya que al ‘Jimmy’ estuvo un periodo largo; y a él no lo dejaron aplicar su proyecto de trabajo ya que solo estuvo a cargo unos meses.
“Respeto a todos los colegas, pero Jimmy estuvo un año y entiendo los tiempos en que vivimos, un año para la gente sin resultados es una eternidad, un año para los directivos sin resultados es una eternidad, es muchísimo y hoy necesitábamos demostrar resultados, nuestra profesión sin resultados no vale lamentablemente, por eso digo que si a mí me hubieran dado un año y me hubiera ido mal, yo estaría acá tranquilo diciendo que la verdad me fue mal en la selección, pero yo estuve siete partidos y perdí sólo uno. Teníamos un montón de proyectos para hacer y crecer, pero sacando eso hay que entender los tiempos donde vivimos, mañana me toca que me contrate un club y tengo que demostrar capacidad y resultados”.
Finalmente mencionó que para que el famoso cambio generacional funcione en la selección, los jugadores deben de pasar por un proceso largo en selecciones menores para que haya una identidad con el representativo, algo que no vio en su estancia.
“Si hablamos de un cambio generacional, debemos de tener un proceso de por lo menos cinco u ocho años en la selección, cuando llegamos el 70% de los jugadores que llegaron al Mundial no tenían proceso de selección y eso es muy grave, eso habla de qué no se trabaja el jugador desde joven para que tenga una identidad en la selección. Se lo llevan para el Mundial o para un torneo y ya está y después no te dan resultados. Después te pones a ver los lugares donde se han logrado éxito y es al revés, más del 70% de jugadores que juegan el Mundial tienen procesos de selección, es casi imposible que un jugador de potencias mundiales no haya pasado por selección antes de ir a un Mundial entonces eso habla de qué hay que trabajar desde abajo”, concluyó.