Un mesero de Nayarit se hizo viral después de que compartió un video en el que manifestó su disgusto luego de que recibió una propina de 36 pesos para una cuenta que costó mil 200 pesos.
El joven explicó que devolvió los 36 pesos a los clientes que se los habían dado como propina, ya que, de acuerdo a su razonamiento, las personas que gastan mil 200 pesos en una cuenta deberían dar una mayor cantidad de dinero en propinas.
“Ese dinero, en cuanto vi que dejaron esa cantidad de dinero, lo agarré, lo llevé y se los entregué en la mano. Yo no quiero ese dinero, ese dinero es una burla, 36 pesos, amigos, para una cuenta de mil 200 pesos, si tienen el dinero para pagar una cuenta de esas, tienen para dar propina, así es de coda la gente”, dijo el mesero.
Usuarios en redes sociales no tardaron en dejar sus comentarios acerca de esta situación, y la gran mayoría de ellos descalificaron las ideas del mesero.
“Si los necesitas, amigo, agarra los 36 pesos y a lo que sigue”, “¿Por qué la propina debería ser obligatoria? Eso sería pagar un impuesto adicional por comer”, “Si tienes un precio por tu producto, ¿por qué debo pagar un sobrecoste voluntariamente? ¿Acaso damos propinas al médico, al oficinista, a los recepcionistas?”, “Yo educadamente le acepto esos 36 pesos que me regresa el mesero y le diría: ‘pues chinga tu madre entonces’ y me iría con 36 pesos más rico”, son algunos de los comentarios.
¿Las propinas son obligatorias?
En México, las propinas no son obligatorias, pero son una práctica común y esperada en muchos servicios. La propina generalmente se considera una forma de agradecer un buen servicio, y su monto puede variar según el tipo de servicio y la calidad del mismo.
Contextos comunes de propinas en México:
• Restaurantes: en restaurantes, es común dejar una propina del 10 por ciento al 15 por ciento del total de la cuenta. Aunque no es obligatorio, se espera que los clientes dejen propina si están satisfechos con el servicio.
• Servicios de hotel: en hoteles, se suele dejar propina a los botones, al personal de limpieza y al servicio de habitaciones. La cantidad puede variar, pero es una cortesía bien recibida.
• Taxis y transporte: aunque no es obligatorio, es habitual redondear la tarifa o dejar una pequeña cantidad adicional como propina al conductor de un taxi o a los servicios de transporte.
• Otros servicios: en servicios como salones de belleza, masajes y otros, dejar una propina también es una práctica común.