A medida que las nubes grises cubren el cielo y las primeras gotas comienzan a caer, se desata un fenómeno que va más allá de lo meteorológico: el impacto emocional de las lluvias en las personas, pues la temporada de lluvias afecta en gran medida el ánimo de las personas.
Para muchos, el clima frío y lluvioso representa una pausa en la rutina diaria, una oportunidad para reflexionar y relajarse, aunque para otros puede significar un desafío adicional en su día a día. Psicólogos y expertos en salud mental destacan que las personas tienen una sensación de melancolía que les lleva a la introspección y a la nostalgia por tiempos pasados.
Además del aspecto emocional, la temporada de lluvias también tiene implicaciones prácticas y sociales. Las condiciones climáticas adversas pueden afectar el transporte y la logística, alterando la rutina diaria de millones de personas. Sin embargo, es precisamente en estos momentos cuando la solidaridad y el espíritu comunitario suelen manifestarse con mayor fuerza, con vecinos ayudándose mutuamente para enfrentar las dificultades que puedan surgir.
Estrés y agotamiento son las principales afectaciones
Yunue Cárdenas, coordinadora del HUB de psicología de Affor Health, señala que fenómenos naturales devastadores como los huracanes pueden desencadenar ansiedad crónica, depresión, estrés y agotamiento emocional en las personas.
Entre los signos de alerta se encuentran las pesadillas, la sensación de peligro constante, tristeza y falta de interés en actividades cotidianas.
Para el 2024, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha pronosticado entre 15 y 18 ciclones tropicales en el Pacífico y de 20 a 23 en el Atlántico, prolongando la temporada hasta noviembre. Este escenario genera incertidumbre sobre posibles impactos y obliga a mantener una vigilancia constante de la evolución de los fenómenos meteorológicos.
El impacto emocional también se refleja en los entornos laborales, donde la preocupación constante puede afectar la productividad, aumentar el ausentismo y provocar desmotivación entre los trabajadores.
El estrés prolongado debido a los huracanes puede comprometer seriamente la salud mental de los empleados.
Además, las ciudades como la Ciudad de México no están exentas del caos causado por las lluvias severas. Inundaciones repentinas afectan las rutas de transporte, causando retrasos significativos y generando frustración entre quienes deben desplazarse diariamente.
Ante este panorama, es crucial que las empresas reconozcan los desafíos adicionales que enfrentan sus empleados durante la temporada de lluvias y huracanes, y proporcionen apoyo psicológico adecuado.
¿Qué hacer para no sentirse triste durante la temporada de lluvias?
Sentirse triste durante las lluvias es algo común y puede estar relacionado con varios factores, como el clima gris, la falta de luz solar o simplemente una sensación de melancolía. Aquí hay algunas sugerencias que podrían ayudarte a sentirte mejor:
- Aprovecha la luz natural: aunque esté nublado, salir al aire libre durante el día puede ayudarte a recibir luz natural, lo cual puede mejorar tu estado de ánimo.
- Ejercicio físico: realizar ejercicio físico, incluso dentro de casa, puede aumentar tus niveles de endorfinas y ayudarte a sentirte más positivo.
- Practica actividades que disfrutes: ya sea leer un libro, ver una película, cocinar algo que te guste o escuchar música, dedicar tiempo a actividades que te hagan sentir bien puede levantar tu ánimo.
- Socializa: hablar con amigos o familiares puede ser reconfortante. A veces, compartir tus sentimientos con alguien cercano puede hacer que te sientas menos solo en tus emociones.
- Considera la terapia: si sientes que la tristeza es persistente o afecta significativamente tu vida diaria, considera hablar con un profesional de la salud mental. La terapia puede proporcionarte herramientas para manejar tus emociones de manera más efectiva.