Mazatlán, Sinaloa (Reacción Informativa).- La pesca deportiva es la principal actividad en la Presa Picachos, centrada en la captura y liberación de especies como la lobina. Este enfoque no solo apoya la conservación del ecosistema, permitiendo que los peces crezcan y se reproduzcan, sino que también ofrece a los pescadores la oportunidad de disfrutar de una pesca sostenible y desafiante.
Según Fidel Vidal de Nomonday Fishing, la pesca deportiva implica engañar al pez con un anzuelo y luego liberarlo de nuevo al agua, un método conocido como “Catch and Release”. Este enfoque contribuye significativamente a mantener la población de lobinas saludable, especialmente durante la temporada de desove de noviembre a marzo.
Además de la lobina, otras especies como la tilapia y el bagre se encuentran en la presa, destinadas principalmente a la pesca comercial. Sin embargo, es la pesca deportiva la que atrae a visitantes tanto nacionales como internacionales, especialmente durante los meses más frescos del año.
Operada exclusivamente por la Cooperativa Picachos, compuesta por 500 miembros activos de los pueblos vecinos, la presa no solo ofrece pesca, sino también servicios completos para los visitantes. Desde restaurantes hasta cabañas de hospedaje, todo está diseñado para complementar la experiencia al borde del lago.
Para aquellos nuevos en la pesca deportiva, se recomienda paciencia y experimentación con diferentes cebos para captar la atención de los peces. Es común que los principiantes contraten servicios de guías locales, quienes no solo conocen los mejores puntos de pesca, sino que también enseñan técnicas básicas como el manejo de la caña y la realización de nudos.
Las sesiones de pesca generalmente duran alrededor de cinco horas, ya sea desde lanchas especializadas como la Robalera o Lobinera, ideales para la pesca deportiva de fondo, o desde la orilla en caso de pescadores solitarios. Los precios de los servicios varían según la duración y el tipo de embarcación, con opciones que van desde los $3,000 hasta los $13,000 pesos, dependiendo de las necesidades y el tamaño del grupo.
Administrada por la Cooperativa Picachos, la presa no solo se dedica a la pesca deportiva, sino que también maneja la pesca comercial de especies como la tilapia y el bagre. Además, la cooperativa opera granjas de tilapia, desde la fertilización de los huevos hasta la liberación de alevines en la presa, contribuyendo así al ecosistema local desde múltiples frentes.
Con cuatro años en funcionamiento, la Cooperativa Picachos continúa ofreciendo una experiencia integral que combina la emoción de la pesca con la belleza natural de Sinaloa, atrayendo a entusiastas de la pesca deportiva y a aquellos en busca de un contacto genuino con la naturaleza.
Salir a pescar en la Presa Picachos al amanecer ofrece una experiencia revitalizadora y emocionante. Para muchos, la jornada continúa con una sesión igualmente intensa por la tarde, acompañada de una espectacular puesta de sol.