El Viernes Santo, día clave dentro de la Semana Santa, es una ocasión de profunda reflexión y recogimiento para millones de cristianos en todo el mundo. Este día, que conmemora la crucifixión y muerte de Jesucristo, está marcado por diversas tradiciones y restricciones que buscan honrar el significado religioso de la fecha.
Según el sacerdote John Henry, de la Diócesis del Espinal, “El Viernes Santo se deben evitar las acciones que pueden lastimar a las personas y tener una buena relación con la familia. Más que hacer ayuno y mantener la abstinencia, lo que pide la Iglesia en esta temporada es afianzar esas relaciones y reivindicar nuestras malas acciones”.
Entre las prácticas tradicionales que están ‘prohibidas’ durante el Viernes Santo se encuentran el ayuno y la abstinencia, las cuales son consideradas como una muestra de penitencia y respeto hacia el sacrificio de Jesucristo. Además, se sugiere evitar el consumo de carne de cerdo, res u otras carnes rojas como parte de este acto de penitencia.
Aunque estas restricciones pueden variar según las creencias y tradiciones locales, existen algunas prácticas adicionales que se consideran inapropiadas durante este día sagrado. Según información recopilada, algunas de estas prohibiciones incluyen:
No vestir de rojo: Se considera un color inapropiado para la solemnidad del Viernes Santo.
No regañar a los niños: Se insta a mantener un ambiente de paz y armonía en el hogar.
No escuchar música: Se busca fomentar la reflexión y el recogimiento espiritual.
No barrer: Se considera una actividad mundana que distrae del verdadero propósito del día.
No cortar cosas: Se evita cualquier tipo de trabajo manual que pueda ser considerado como una distracción.
No clavar cosas: Esta restricción está relacionada con el simbolismo de la crucifixión de Jesucristo.
No salir después de las 3 de la tarde: Se considera un momento de recogimiento y oración en memoria de la muerte de Jesús.
Es importante destacar que estas prácticas varían según las costumbres y enseñanzas de cada comunidad religiosa, y que el objetivo principal es honrar el sacrificio de Jesucristo y profundizar en la espiritualidad durante este día sagrado.