Los dos policías que fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la República por la muerte de Yanqui Kothan Gómez Peralta, normalista de Ayotzinapa, permanecerán en la cárcel ya que un juez federal les dictó prisión preventiva.
Durante la audiencia realizada en las instalaciones del Poder Judicial Federal, ubicado en la Zona Diamante de Acapulco, el juez determinó dictarles la medida cautelar a los agentes estatales, los cuales están acusados de homicidio calificado doloso y tentativa de homicidio por los hechos ocurridos la noche del 7 de marzo en el libramiento Chilpancingo-Tixtla.
Aún está pendiente por cumplimentarse una orden de aprehensión contra un tercer elemento, identificado como Daniel ’N’ y quien es el policía que le disparó al joven normalista de Ayotzinapa y le provocó la muerte debido al impacto de bala en la cabeza, de acuerdo con las investigaciones.
Los dos policías detenidos por su presunta participación en la muerte de Yanqui Kothan Gómez Peralta fueron entregados por la Secretaría de Seguridad Pública del estado a la FGR, la cual atrajo el caso, la noche del miércoles 13 de marzo, a casi una semana de los hechos.
¿Qué pasó con Yanqui Kothan Gómez Peralta?
La Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero aseguró en su informe sobre los hechos que los normalistas de Ayotzinapa que viajaban en la camioneta, que presuntamente tenía un reporte de robo activo, habían disparado contra los agentes en un punto de revisión en el libramiento Chilpancingo-Tixtla, por lo que repelieron la agresión y en esa acción lesionaron a Yanqui Kothan Gómez Peralta, de 23 años, quien finalmente murió en el hospital.
En el reporte además se aseguró que al interior de la camioneta había sido hallada un arma corta, cartuchos útiles, droga en bolsitas y cervezas. Sin embargo, tras las pruebas practicadas al cuerpo de Kothan Gómez y a otro de los normalistas que iba con él, el cual fue detenido, se descartó que hubieran disparado algún arma, además de que tampoco tenían rastros de haber consumido drogas ni alcohol.
El dictamen pericial determinó que la muerte del joven de 23 años que estudiaba en la Normal Rural Isidro Burgos se debió a un disparo en la cabeza que le provocó hemorragia interna y externa por traumatismo craneoencefálico con fractura en bóveda craneal y laceraciones encefálicas consecutivas.
De acuerdo con la madre del joven, en la camioneta viajaban tres personas, entre ellos Kothan Gómez, quienes hicieron una parada en una tienda cercana al módulo de vigilancia para comprar cigarros. Uno de los acompañantes se bajó y entró al negocio y fue cuando ocurrieron los hechos.
“El que se bajó a comprar huyó y a ese no lo identificaron los policías, pero me pregunto: ¿si los estudiantes se negaron a detener o dispararon, a poco le pidieron permiso para ir a comprar cigarros? Pues no”, cuestionó el sacerdote Filiberto Velázquez Florencio, director del Centro de Defensas de las Víctimas de la Violencia, quien da acompañamiento a la familia del joven normalista de Ayotzinapa.
Los hechos registrados el 7 de marzo llevaron a normalistas de Ayotzinapa a realizar violentas protestas para denunciar estos hechos, tras acusar que el arma en la camioneta había sido sembrada, por lo que exigieron justicia para el asesinato de su compañero.
En una de sus mañaneras el presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a la FGR que atrajera el caso, a fin de que se esclareciera y posteriormente confirmó que hubo un abuso de autoridad ya que se confirmó que Yanqui Kothan Gómez Peralta no había disparado ningún arma, por lo que dijo que sí se trató de un asesinato por parte de policías estatales.
Fiscalía de Guerrero y SSP se enfrentan; caen primeros funcionarios
Tras revelarse que el policía que presuntamente mató al normalista de Ayotzinapa, la Fiscalía de Guerrero salió a deslindarse al señalar que ninguna autoridad había puesto a disposición ante esa instancia a los agentes involucrados, por lo que nunca estuvieron detenidos ya que tampoco cuenta con la facultad para realizar “arrestos administrativos”.
Sin embargo, la Secretaría de Seguridad Pública del estado respondió que los tres policías se presentaron a la mañana siguiente de los hechos para declarar voluntariamente ante la Fiscalía de Guerrero y precisó que era competencia de dicha instancia el retener a los elementos.
“Es competencia del órgano de procuración de justicia la retención de los elementos por al menos 48 horas y en su caso, solicitar la ampliación del término, así como solicitar la orden de aprehensión”, puntualizó.
A una semana del asesinato de Kothan Gómez y luego de los deslindes de ambas dependencias, la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, pidió las renuncias a los secretarios de Gobierno, Ludwig Marcial Reynoso Núñez, y de Seguridad, el general Rolando Solano Rivera, además de que anunció el cese de la fiscal Sandra Luz Valdovinos Salmerón, quien rechazó la destitución y advirtió que agotará los procedimientos constitucionales y legales y su garantía de audiencia y debida defensa.