El valor de las frutas y las verduras a la baja, los productos agropecuarios durante la primera quincena de febrero, particularmente el jitomate, ayudó a disminuir la inflación en el periodo.
Y es que, en la primera quincena de febrero de 2024, el INPC disminuyó 0.10% respecto a la quincena anterior. Con este resultado, la inflación general anual se ubicó en 4.45%. En la misma quincena de 2023, la inflación quincenal fue de 0.30 % y la anual, de 7.76%.
Las presiones sobre los precios subyacentes continúan disminuyendo, incluso cuando las que inciden en precios de los servicios siguen siendo elevadas, estimó Iván Arias, jefe de estudios económicos de Citibanamex.
Proyectamos que la inflación subyacente se mantenga en una trayectoria descendente gradual, compensando en parte el aumento de la no subyacente ante una recuperación de los precios de la energía.
“Como riesgos al alza destacamos la persistencia del componente subyacente, y como riesgos a la baja un efecto mayor al estimado de la apreciación del peso y la desaceleración de la actividad”.
Citibanamex mantuvo sus estimaciones para la inflación general y para la inflación subyacente anual al cierre de 2024 en 4.3% y 4.5%, respectivamente.
Por su parte, un análisis de Jessica Roldán, economista en jefe de Finamex, apuntó que los datos de hoy, particularmente los precios agrícolas, otorgaron un muy necesario alivio para el panorama inflacionario.
“Esto, junto con el hecho de que los precios de los bienes continuaron mostrando cifras más cercanas al promedio, señala en la dirección correcta para que Banxico ajuste la tasa de referencia a la baja, al menos por el momento”, detalló.
Roldán coincidió en la expectativa de que el banco central implemente un recorte de 25 puntos base puede darse ya en la reunión de marzo.
“Sin embargo, el camino por delante será difícil ya que los precios de los servicios continúan siendo una fuente de incertidumbre, y los costos energéticos podrían representar riesgos adicionales en el futuro”, apuntó la especialista financiera.
Al mismo respecto, Alejandro Saldaña, director de estudio del banco Bx+, agregó que la variación quincenal fue la menor para una primera quincena de febrero en cinco años, ante el retroceso de la no subyacente.
Explicó que incidió la baja de productos agropecuarios, que habían tenido grandes incrementos en diciembre y enero, más el aumento en los precios de energía.
“El índice subyacente hiló 25 lecturas a la baja y creció a su menor ritmo desde junio de 2021. Gran parte de la desaceleración se ha explicado por el apartado de mercancías, en especial las no alimentarias, ante la dilución de los choques de años pasados (pandemia, guerra Ucrania) y la apreciación cambiaria”.
“Sin embargo, reconocemos que el panorama todavía es incierto y predominan los riesgos al alza”, indicó Saldaña.
El economista comentó que “… un entorno de moderación en el crecimiento económico contribuiría a que la inflación ceda un poco más en 2024”.
Saldaña dijo que en particular todavía se observará cierta renuencia en el rubro de los servicios, dentro del índice subyacente, principalmente por el traspaso de las presiones salariales acumuladas.
“Además, las tensiones geopolíticas actuales (Ucrania, Gaza y China) y los eventos climáticos (sequías) pueden presionar algo más los precios de energéticos y alimentos”, abundó el experto.