La Policía Nacional de Ecuador aseguró más de seis toneladas de cocaína camufladas en un cargamento de polietileno de alta densidad, que tenían como destino Ensenada, Baja California, en México.
Así lo dio a conocer la institución en un comunicado, en el que detalló que el aseguramiento se realizó al revisar el contenedor donde se encontraba la mercancía, en uno de los muelles del puerto de Guayaquil, considerado como una de las principales puertas de salida de Sudamérica para la cocaína que llega a Norteamérica y Europa.
La operación, bautizada como “Triste Amanecer”, fue realizada el pasado 18 de febrero. Las pruebas confirmaron que la sustancia localizada era clorhidrato de cocaína, con un peso de 6 toneladas 70 kilos 495 gramos.
Dentro del contenedor había 6,101 paquetes rectangulares de cocaína envueltos en cinta de embalaje, cuyo valor en México alcanzaría los 91 millones de dólares y en Estados Unidos llegaría a los 244 millones de dólares, según Víctor Herrera, comandante de la Policía para la Zona 8, que comprende Guayaquil y su área metropolitana.
En el operativo, luego de trazar el origen del envío de esta mercancía que iba a ser exportada a México, se logró la detención de dos hombres, uno de ellos con antecedentes por falsificación de firma y de documentos y por asociación ilícita.
La policía ecuatoriana informó que uno del hombre aprehendidos es el representante legal de la empresa exportadora del cargamento y dijo a las autoridades que había sido previamente contratado por otro hombre para fungir como representante de la empresa.
Los hombres detenidos fueron identificados como Marcos Luis “B” y Franklin Raúl “Y”, ambos ecuatorianos.
La policía destacó que desde inicios de 2024 ya se han decomisado más de 43 toneladas de drogas solo en Guayaquil, capital de la costera provincia de Guayas.
El aseguramiento se dio a conocer un día después de que la Policía y la Marina de Ecuador informaron del aseguramiento de cerca de 1.5 toneladas de clorhidrato de cocaína, a 100 millas náuticas, que supuestamente tenía como destino final México.
Rodeado por Colombia y Perú, los dos mayores productores mundiales de cocaína, Ecuador se ha vuelto en los últimos años en un punto clave del tráfico mundial de esa droga, al aprovechar las mafias sus puertos y costas para enviar toneladas de esa droga hacia Europa y Norteamérica.
Esto le ha hecho a Ecuador ser también en el tercer país del mundo que más droga decomisa, sólo por detrás de Colombia y Estados Unidos, pues anualmente ha superado las 200 toneladas de estupefacientes incautados en los últimos tres años.
Las bandas del crimen organizado que operan en Ecuador han tejido nexos con cárteles mexicanos de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, según las autoridades ecuatorianas, y el transporte en lancha o semisumergible se ha vuelto frecuente para hacer llegar la droga a Norteamérica.
Al mismo tiempo también se han vinculado a la mafia albanesa para los envíos a Europa, en contenedores de mercancías que se embarcan en los puertos ecuatorianos.