La cuesta de enero puede resultar un verdadero reto para los bolsillos de muchas personas. Si ya te quedaste sin quincena y te preguntas cómo enfrentar los gastos de este mes, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) tiene algunos consejos para ayudarte a sobrellevar esta temporada.
• Compara precios en diferentes establecimientos: Esto te ayudará a pagar un mejor precio por un mismo producto o servicio.
• No uses la tarjeta sin control: Limita su uso para lo indispensable. Si tienes varias, valora la posibilidad de cancelar todas, excepto una, la que te cobre menos intereses.
• Cambia tus hábitos de consumo: Esto podría representar un ahorro de dinero extra, por ejemplo, lleva comida al trabajo, reduce tu plan de celular y streaming, evita los gastos hormiga (Café o golosinas en el trabajo).
• Haz un balance de la situación: Identifica cuánto dinero tienes a través de un presupuesto, cuánto debes, qué tiene prioridad y tu margen de ahorro.
Recorta gastos: Haz una lista de los productos y servicios verdaderamente necesarios. Evita compras innecesarias y compulsivas y trata de seguir tu presupuesto.
Ordena tus deudas: Por un monto y tasa de interés, analízalas y decide cuál pagar primero. Destina un monto mayor al pago de la deuda que dejarás atrás en el menor tiempo (paga al menos el doble del pago mínimo). Haz esto con todas las deudas de forma sucesiva.
Conserva la calma: Darte cuenta de la cantidad de deudas puede generar estrés. Concéntrate en desarrollar una estrategia para reducir y conseguir estabilidad.
¿Qué es la cuesta de enero?
La cuesta de enero es un término comúnmente utilizado para describir las dificultades financieras que muchas personas enfrentan al comienzo del año, después de las celebraciones navideñas y de fin de año, donde las familias tienden a gastar más dinero en regalos, comidas festivas y actividades recreativas.
A todo ello se le suma la inflación, al respecto, el banco BBVA explica lo siguiente:
“La cuesta de enero es un fenómeno económico que ocurre cada año como causa de la inflación, ya que todo incrementa su costo. Por ejemplo, si generalmente gastas $500.00 a la semana para comprar la despensa, para el próximo año esa cantidad no te será suficiente para comprar todo lo que sueles adquirir”.