“Ha ido todo bien. Ya todo queda en manos de la justicia”, declaró Jennifer Hermoso tras compadecer ante el juez sobre el caso Luis Rubiales, que causó revuelo a nivel mundial.
La futbolista de los Tigres sufrió un acto de abuso sexual al recibir un “beso no consentido” por parte del entonces presidente de la Real Federación Española de Futbol (REFEF), tras ganar la Copa Mundial Femenina de la FIFA.
Las imágenes causaron tanta indignación en cada rincón del planeta, que tras varias semanas de resistencia, finalmente Rubiales decidió hacerse a un lado, a pesar de que él insistía que el beso había sido consensuado.
Jenni Hermoso, futbolista de los Tigres de la Liga BBVA Femenil MX, negó con contundencia lo mencionado por el ex dirigiente, asegurando que el beso la sorprendió, y que nunca había conentido dicha acción por parte del mandatario. Este miércoles, durante la Audiencia Nacional, confirmó su versión, y añadió que el entorno de Rubiales la presionó durante semanas para que saliera a defender públicamente al funcionario. Ella se negó.
Los delitos que enfrenta Luis Rubiales
De acuerdo con el juez, hay dos delitos en proceso: el primero, la agresión sexual de Rubiales, es decir, el beso en la boca no consentido que le dio a Jennifer Hermoso el 20 de agosto en Sídney, Australia, durante la entrega de medallas tras la final de la Copa Mundial; la segunda falta integra la presunta operación de hostigamiento dentro de la Federación hacia la futbolista y sus seres cercanos, con la finalidad de que restara importancia de manera pública a lo ocurrido.
Sin embargo, lejos de finalizar la polémica, conforme avanzaban los días todo se tensaba más, hasta que la FIFA optó por suspender de manera indefinida al máximo dirigente del futbol en España.
”Muchas gracias por el apoyo que habéis tenido conmigo. Estoy bien, estoy fuerte”, dijo Hermoso tras sus declaraciones a puerta cerrada al juez.
