La tarde de este miércoles 22 de noviembre, personal de las Fuerzas Armadas de México desplegaron un intenso operativo por aire y tierra en Culiacán, Sinaloa con un único objetivo: capturar a Néstor Isidro Pérez Salas, alias El Nini.
Fuentes del gobierno del estado confirmaron a Milenio que el jefe de seguridad de Los Chapitos fue detenido en la colonia Jardines de la Rivera, aproximadamente a las 13:27 horas.
La orden de aprehensión fue ejecutada por elementos de la Guardia Nacional, quienes lo pusieron a disposición de la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO).
Néstor Isidro Pérez Salas era buscado por autoridades estadunidenses y mexicanas al ser identificado como el jefe de seguridad de la facción del Cártel de Sinaloa que encabezan los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán.
“Hoy con Archivaldo estoy al tiro, con el Panu y Alfredito. Brindo mi apoyo y equipo, peguen el grito. Rezo a mi niña de la guadaña porque es la que siempre me acompaña, salgo a las misiones en caliente, ya no hay nada que me arriende”, son algunos versos del tema El #09 que el popular cantante de corridos Gerardo Ortiz estrenó en 2017.
En aquel año, El Chapo Guzmán fue extraditado a Estados Unidos y sus hijos -Iván Archivaldo, Jesús Alfredo, Ovidio y Joaquín- apenas se perfilaban para encabezar la que ahora es considerada por el Departamento de Justicia de Estados Unidos como la facción más poderosa del Cártel de Sinaloa.
Pese a que desde entonces el narcocorrido de Gerardo Ortiz ya daba cuenta de la existencia y actividades delictivas de un despiadado lugarteniente y colaborador de Los Chapitos, fue el 17 de octubre de 2019 cuando tanto los hijos del otrora narcotraficante sinaloense como el ‘mini ejército’ de sicarios que tienen a su servicio acapararon la atención mediática.
Aquella fecha, conocida también como el Jueves Negro o el Culiacanazo quedó grabada en la historia de México como el día que el Cártel de Sinaloa “doblegó” al presidente Andrés Manuel López Obrador luego de que diera la orden de dejar en libertad a Ovidio Guzmán López, alias El Ratón.
La decisión del mandatario tabasqueño se tomó luego de que, tras un operativo fallido desplegado por las Fuerzas Armadas, un grupo de hombres fuertemente armados desataron balaceras y terror en las calles de Culiacán y municipios aledaños.
El brazo armado al servicio de la poderosa facción del Cártel de Sinaloa es identificado por autoridades mexicanas y estadunidenses bajo el nombre de Los Ninis, el cual se desprende del alias de su líder: Néstor Isidro Pérez
De acuerdo con una acusación presentada en 2021 en el Distrito de Columbia y consultada por MILENIO, otros de los apodos a los que responde el jefe de seguridad de Los Chapitos son: Néstor Ernesto Pérez Salas, El General, El 19, El 09 o Novena.
En el documento judicial se indica que, al menos desde 2012, el Nini conspiró y acordó intencionalmente la fabricación y distribución de 5 kilogramos o más de cocaína, metanfetamina y otras sustancias controladas cuyo objetivo era ser traficadas a Estados Unidos.
El segundo cargo que Néstor Isidro Pérez Salas enfrenta en el Distrito de Columbia está relacionado al uso, portación y detonación de armas de fuego de manera consciente e intencional durante y en relación con uno o más delitos.
El Nini también es acusado de asesinar e intentar matar a una o más personas, además de amenazar, causar lesiones e intimidar como forma de represalia a individuos que han brindado información relevante sobre el negocio ilícito que protege.
Por su parte, el Departamento de Estado del país de las barras y las estrellas señala a Néstor Isidro Pérez Salas y a Óscar Noé Medina González, alias El Panu, como los responsables del aparato de seguridad de Los Chapitos. Ambos estarían trabajando directamente para Iván Archivaldo Guzmán Salazar.
“El 4 de abril de 2023, un gran jurado federal sentado en el Distrito Sur de Nueva York presentó una acusación contra Néstor Isidro Pérez Salas y otros acusándolos de participar en una empresa criminal continua, conspiración para la importación de fentanilo, conspiración para el tráfico de fentanilo, posesión de ametralladoras y dispositivos destructivos, conspiración para poseer ametralladoras y dispositivos destructivos y conspiración para lavado de dinero”, se lee en un perfil de el Nini publicado en la dependencia estadunidense.
El Programa de Recompensas del mismo departamento ofrece una remuneración de 3 millones de dólares por información que conduzca al arresto y condena de Néstor Isidro Pérez Salas.
Asesino por pasatiempo
En la reciente entrevista exclusiva que Dámaso López Serrano concedió a la periodista Anabel Hernández, el ex socio de Los Chapitos relató que el Nini le pidió trabajo cuando él aún era parte del Cártel de Sinaloa.
“En los inicios de Nini me pedía trabajo a mí, tenía amistad con mi secretario. ¡Era un niño!, estaba chaparrito, flaquito, era un niño”, señaló el Mini Lic a la también escritora.
Dámaso López Serrano recordó que la primera vez que lo vio Néstor Isidro Pérez Salas tenía la apariencia de un niño de secundaria, no obstante, se presentó dispuesto a hacer cualquier cosa que le mandaran.
El Mini Lic se negó a contratarlo como sicario por su corta edad, no obstante, relata que el Nini andaba en una camioneta de madrugada disparando a las personas que se cruzaban en su camino para “demostrar su valor”.
“Él estaba hablando con mi secretario y le decía ‘ira güey escucha para que veas que yo lo que me pongan a hacer’, y se estacionó y se escucha el grito, porque mi secretario estaba grabando. ‘¡Hey! ¡Ven! ¿Quihubo? ¿Qué andas haciendo?’, era como un albañil o algo así porque le dijo ‘yo voy aquí para chambear’. ‘Ah Ok’, dijo Nini y comenzó a dispararle y arranca la camioneta y dice a mi secretario: ‘¿Escuchaste? Acabo de matar, y ahorita me voy a encontrar otros tres’”, describió el crudo episodio el Mini Lic en entrevista con Anabel Hernández.
La acelerada actitud de el Nini y su brutalidad para matar a sangre fría llevaron a Dámaso López Serrano a considerarlo como “un trastornado que asesina por puro pasatiempo”.
Pese a la negativa del Mini Lic, Néstor Isidro Pérez Salas terminó por convertirse en sicario del Cártel de Sinaloa luego de que lo contratara Óscar Noé Medina Gonzáles, alias Panu.
“Lo que sea de cada quién, porque yo acepto, lo mandaban a hacer cosas y las hacía. ‘¡Mata a aquel!’, y decía ‘sí’, no preguntaba ni porqué o cómo, él solo iba y lo hacía. Entonces Iván lo jaló con él. Panu ya salió mal con Nini porque Nini se alborotaba mucho y quería andar matando y Panu dijo: ‘no’”, continuó relatando el Mini Lic a Anabel Hernández.
El ex socio de Los Chapitos detalló que el encargado de sacarle jugo al instinto asesino de el Nini fue nada más y nada menos que Iván Archivaldo Guzmán Salazar, quien rápidamente lo acogió como su mano derecha y puso bajo sus órdenes primero a un mini ejército de 30 personas que con el paso de los años se volvieron 100.
Dámaso López Serrano afirma que en una reunión en la que estuvo presente, Iván citó a su jefe de seguridad y a otro integrante de la organización con el que había tenido un conflicto. El quejoso apenas comenzaba a hablar cuando, sin remordimiento alguno, el Nini le disparó en la cabeza. Mini Lic describe que Iván y El 09 terminaron riendo a carcajadas.
Distintas organizaciones delictivas han encontrado la forma de proteger su millonario imperio criminal a través de una brutalidad que ha sumergido a México en un espiral de violencia.
No obstante, la historia de Néstor Isidro Pérez Salas es el claro ejemplo de que grandes capos tienen a su servicio a sicarios encargados de hacerles “el trabajo sucio” a cambio de unos cuántos dólares o corridos interpretados por el artista más famoso y reconocido de la actualidad, tal y como lo es su amigo Peso Pluma.
El vínculo de Peso Pluma con el Cártel de Sinaloa
A lo largo de este 2023, Hassan Emilio Kabande Laija, mejor conocido como Peso Pluma, se convirtió en uno de los artistas más aclamados y codiciados de la industria del entretenimiento.
Con múltiples temas encabezando las listas de popularidad de distintas plataformas de streaming y con colaboraciones de talla internacional, el joven originario del estado de Jalisco se convirtió en un referente del regional mexicano, en especial de los corridos tumbados.
Pese a que nuevas generaciones fueron cautivadas con el fresco estilo y perfil de Peso Pluma, sus composiciones y presentaciones han sido criticadas en más de una ocasión por supuestamente hacer “apología al narcotráfico”.
Y es que, algunos de sus más grandes éxitos contienen versos y estrofas que hacen referencia a una de las organizaciones delictivas más poderosas de México y el mundo: el Cártel de Sinaloa.
Durante décadas, a distintos artistas del regional mexicano como Chalino Sánchez, Valentín Elizalde o Jenni Rivera, se les vinculó con integrantes de la delincuencia organizada.
En el caso de Peso Pluma, autoridades mexicanas o estadunidenses no habían informado sobre algún posible vínculo, no obstante, las amenazas de muerte que recibió en Tijuana por parte del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y una entrevista exclusiva que la periodista Anabel Hernández le realizó a Dámaso López Serrano -alias Mini Lic- han dado un giro de 180 grados a su carrera musical.
El hijo de Dámaso López Núñez -quien en su momento fue la mano derecha de El Chapo Guzmán- rompió el silencio y dialogó con algunos medios de comunicación sobre su experiencia al estar en la cúpula del Cártel de Sinaloa y ser parte del círculo más cercano de Los Chapitos.
El Mini Lic declaró a la periodista Anabel Hernández que dentro del mundo del narcotráfico es común que líderes e integrantes contraten a artistas o grupos musicales famosos para amenizar sus fiestas o componerles temas.
Fue así como Dámaso López Serrano aseguró que Peso Pluma es un amigo cercano de Néstor Isidro Pérez Salas, alias el Nini, quien, hasta este miércoles 22 de noviembre, se desempeñaba como jefe de seguridad de la facción de Los Chapitos.
Al ser cuestionado sobre el vínculo del popular cantante de corridos tumbados con el Cártel de Sinaloa y la facción que encabezan los hijos de El Chapo, el Mini Lic contestó:
“Sí, más que nada con Nini… va, le toca, tienen comunicación, favores, como cualquier favor. Ya sea como que ‘préstame un auto’, ‘golpea a aquel’, porque te digo, a veces los músicos se creen que son otra cosa (narcos) y no entienden que hay una barrera, que ellos son músicos, y otros que son políticos o son narcotraficantes”.