Uno de los principales temas en el debate público es la reforma que plantea la reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas a la semana con el fin de garantizar el cuidado de la integridad física y mental de las y los trabajadores mexicanos; sin embargo, la propuesta se mantiene “congelada” en la Cámara de Diputados.
De acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en México se trabajan un promedio de 2 mil 137 horas al año, por lo que el sector obrero ha alzado la voz para empujar la iniciativa que, de acuerdo con el diario español El País, sería discutida y votada el próximo 21 de noviembre, antes de que termine el actual periodo de sesiones en San Lázaro.
Aunque hay consenso, legisladores “ven difícil” que llegue pronto la reforma
En septiembre pasado, la diputada Susana Prieto Terrazas, quien presentó la iniciativa, adelantó que la reducción de la jornada laboral, así como otras iniciativas en beneficio de los trabajadores la llamada “Ley Silla”, que busca prohibir que empleados permanezcan de pie durante todo su horario laboral, serían discutidas a la brevedad en la Cámara de Diputados.
En ese entonces, la legisladora morenista advirtió que, a pesar de que hay “muchas presiones” de los diversos sectores obreros del país, “ve difícil” una pronta reducción de la jornada laboral con la reforma del apartado A del artículo 123 de la Constitución de México. “Ya hay mucha presión, así es de que, yo no pierdo la posibilidad, no pierdo la esperanza de que así sea”, comentó el pasado 5 de septiembre.
¿Por qué no pasaría la reducción de la jornada laboral?
Más recientemente, el coordinador de los diputados del Partido Acción Nacional (PAN), Jorge Romero Herrera, afirmó que, a pesar de que hay intención de los líderes parlamentarios de aprobar la reducción de jornada laboral, es “casi imposible” aprobarla este año, pues al tratarse de una reforma constitucional también tiene que ser aprobada por el Senado de la República y por al menos 17 de los 32 estados del país.
Por otra parte, el sector empresarial no parece estar convencido de la reforma, al argumentar que traerá repercusiones si la medida no se aplica gradualmente. Así, organismos que en principio de posicionaron a favor, se han retractado, pues como destaca la periodista Viridiana Ríos, debido al “cabildeo empresarial”, en los últimos 13 años han sido frenadas 17 iniciativas para reducir la jornada laboral.