Jorge Ortiz de Pinedo es uno de los mayores íconos de la televisión y humor mexicano. Sin embargo, la vida de este gran comediante se ha visto inundada de tragedia, tal y como aquel año 1985 cuando perdió a su madre y a su hermana tras el secuestro del avión en el que viajaban, todo esto a cargo de un grupo terrorista.
En entrevista con Matilde Obregón, Ortiz de Pinedo relató todo el calvario que tuvo que pasar para poder encontrar los cuerpos de sus seres queridos al otro lado del mundo. El actor mencionó que todo comenzó como un regalo para su mamá, quien quería y deseaba ir a Europa.
“Antes de comprar un coche o dar el enganche de un departamento, quise darle algo a mi mamá y ella siempre había querido ir a Europa. Contratamos un viaje dos meses, compramos todo: hoteles, pasajes, entradas a museos, todo. Yo me sentía muy feliz”, comenzó relatando.
Una vez hecho el viaje, su hermana y su madre, quienes viajaron juntas tomarían un vuelo de Atenas a El Cairo, en donde verían a un amigo. Sin embargo, un grupo de terroristas secuestró el avión, ordenando a los pilotos redireccionar el vuelo a Libia.
“Los guardias trataron de defender el avión, se arma una balacera y ventanas se rompen. Los secuestradores querían ir a Libia. Luego de no ser recibidos en ningún aeropuerto, en la noche se aterrizó en Malta en donde nadie quiso darles gas para continuar el viaje”.
Luego de negociaciones, los secuestradores pidieron que bajaran las mujeres árabes, pero entre ellas, una mujer judía se coló, provocando que todo acuerdo quedará atrás. A ella la ejecutaron. Momentos después, un comando egipcio trató de entrar al avión usando bombas, lo que provocó que los terroristas respondieran de la misma manera, desencadenando una balacera y un incendio.
“Los terroristas respondieron con bombas. De los 90 y tantos pasajeros, 80 murieron, entre ellos mi madre y mi hermana”, dijo.
Así se enteró de la tragedia
Mientras tanto, Jorge se encontraba realizando una obra de teatro cuando fue notificado de la situación aún sin saber del desenlace trágico de sus familiares.
“Cuando yo me enteré estaba haciendo una obra de teatro, cuando me dan la noticia yo empiezo a hablar a Tv Azteca pero la noticia aún era muy vaga. No podía comunicarme con nadie del gobierno de México; logré comunicarme a Egipto, pero no podían hacer nada”, dijo.
Desesperado, Ortiz de Pinedo llegó a Washington en donde le pudieron confirmar que tanto su madre como su hermana se encontraban entre las personas asesinadas.
“Hablé con mi hermano y me fui para ver en donde estaba mi mamá y mi hermana, sin tarjetas de crédito ni nada. Cuando llego a Washington me dicen que ya no vaya a Atenas porque ellas no se encontraban entre los sobrevivientes y tuve que dirigirme a Malta”.
Ya en Malta, el acto tuvo que reconocer los cuerpos entre más de 50 cadáveres, algunos quemados, otros con heridas de bala y unos cuantos más asfixiados.