Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, calificó como de “acciones publicitarias muy vulgares” por parte del Gobierno de Texas, encabezado por el republicano Greg Abbott, la colocación de un cerco de alambre y una barrera de boyas en medio del río Bravo, frontera con EE.UU.
En la conferencia matutina de Palacio Nacional, López Obrador hizo un llamado a los connacionales en dicha región de Texas para que no voten por el gobernador de Texas y por los legisladores republicanos.
“No hay que hacer mucho, nada más decirles a nuestros paisanos que no voten por el gobernador de Texas (Abbott), ni por los legisladores del Partido Republicano que apoyan esas medidas que, dicho sea de paso, son acciones publicitarias muy vulgares”, dijo.
“Lo hacen para tratar de engañar al pueblo estadounidense, a los texanos, de que ellos si son muy estrictos, y ellos van a impedir que lleguen migrantes que son los que traen, o llevan la droga a Estados Unidos, que los dañan mucho a los estadounidenses, puro cuento, pura mentira. Estoy seguro que esos políticos del Partido Republicano, de Texas, van a los templos y se olvidan de lo que dice la Biblia”, indicó.
El gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, dijo el jueves pasado que ya se ha iniciado la instalación de una barrera de boyas en el río Bravo como parte de sus esfuerzos para para frenar la llegada de migrantes y el tráfico de drogas.
Los primeros 300 metros de boyas se comenzaron a instalar en el sector de Eagle Pass, en el condado de Maverick, conocido por ser un paso regular de migrantes indocumentados, dijo Abbott en un mensaje de Twitter.
La barrera flotante es parte del plan de seguridad fronteriza de 5 mil millones de dólares del gobernador republicano que, según dijo, ya ha tenido un gran impacto en la desaceleración de los cruces ilegales.
Activistas y residentes del sur de Texas protestaron la semana pasada por la instalación de las boyas. Adriana Martínez, geomorfóloga fluvial que ha publicado estudios sobre el efecto de la construcción de barreras en la frontera, dijo que “las boyas son otro intento de militarización de nuestra frontera que tiene un impacto en el río”.
La barrera ya enfrenta una demanda legal, establecida la semana pasada por Jessie Fuentes, dueño de un negocio de alquiler de kayaks, que alega que las boyas afectarán su empresa por limitar el acceso al río.
Por su parte, el director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, coronel Steven McCraw, ha defendido las boyas bajo el argumento de que se pueden desplegar rápidamente y son móviles.
Alicia Bárcena, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), informó que envió una nota diplomática a las autoridades de EE.UU., luego de que el Gobierno de Texas iniciara la colocación de una barrera de boyas en el río Bravo.
En un desayuno con medios de comunicación, pocos días después de asumir la jefatura de la diplomacia mexicana, Bárcena Ibarra detalló que el Gobierno de Texas, encabezado por el republicano Greg Abbott, está violando el tratado de aguas binacional de 1944, razón por la cual se envió la nota diplomática.