Seis personas han sido fusiladas en la madrugada de este martes en Apodaca, un municipio localizado al norte del área metropolitana de Monterrey (Nuevo León). Los cuerpos de las víctimas, cuatro hombres y dos mujeres, aparecieron en un paredón situado junto al arroyo Topo Chico con disparos en la nuca y con signos de tortura.
La Fiscalía de Nuevo León recibió la alerta por el sonido de los disparos en torno a las 12.30 de la noche. A su llegada, los agentes encontraron a las seis personas tiradas en el suelo: cinco estaban maniatadas; tres tenían las cabezas cubiertas con camisetas. Todas estaban sin vida. Fueron fusilados junto al arroyo que separa en dos al municipio regio de Apodaca (657.000 habitantes). La imagen del lugar es la de una carretera desgastada y un paredón pintado con grafitis que separa el arroyo de un barrio residencial.
La ciudad se encuentra al norte de la metrópoli de Monterrey, un territorio que no supone la excepción de la violencia que sacude a la zona fronteriza con Estados Unidos. La cercanía de las ciudades al vecino del norte es vista por las organizaciones criminales como un oportunidad de para extender el negocio del narcotráfico en un amplio mercado (Estados Unidos cuenta con alrededor de 330 millones de habitantes). A comienzos de este año, la oleada de violencia volvía a dar signos en Salinas Victoria, un municipio de 13.000 personas que también ha estado sacudido por la delincuencia y los homicidios. El 2 de enero, un grupo armado tomó por la fuerza un rancho de la localidad y abrió fuego contra un grupo de policías. Los fugitivos huyeron del lugar, y se escondieron en la propiedad de un ganadero, en Villaldama, a unos 60 kilómetros del otro municipio.
La casa del ganadero se encontraba en la conocida como “carretera de la muerte”, un camino de huida que conecta a Monterrey y Nuevo Laredo (Tamaulipas) y que fue utilizado por un grupo armado del Cartel del Noreste en sus tanteos de otros territorios. Las rutas que conectan ambas ciudades volvieron a ser noticia hace tan solo unas semanas, cuando la policía neoleonesa asesinó a 10 presuntos delincuentes en una autopista. Cuatro policías resultaron heridos, al parecer ninguno de gravedad. El Estado de Nuevo León cerró el 2021 —el último año con los registros completos— con 1.070 homicidio, lo que supuso en torno al 3% del total en México (35.700 homicidios), según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).