Para combatirlo, Roland Garros ha puesto a su disposición un dispositivo de “guardaespaldas digital” que, apoyado en la inteligencia artificial, borra los mensajes duros de sus cuentas en redes y moderan otros críticos.
“El objetivo es preservar a los jugadores y su salud mental de manera directa o indirecta”, explicó el responsable de la empresa Bodyguard, Yann Guerin, que se ha asociado para desarrollar esta herramienta con los organizadores del Grand Slam de tierra batida, que concluirá el próximo 11 de junio.
La idea no es solo proteger a los tenistas, sino también a su entorno, que puede sufrir de forma indirecta por los mensajes que muchos fanáticos cuelgan en las redes sociales.
El caso de la japonesa Naomi Osaka es paradigmático. La exnúmero uno del Mundo se retiró de Roland Garros en 2021 al considerarse incapaz de soportar la presión mediática que experimentaba.
Aunque en concreto Osaka señaló que su problema era dirigirse a los medios de comunicación en las ruedas de prensa obligatorias en el torneo, también hizo referencia a toda la presión añadida y aseguró que estuvo al borde de la depresión.
El suyo no es un caso aislado y Roland Garros ha querido abordarlo para evitar que cobre más peso.
Gracias a Bodyguard, los jugadores tendrán la oportunidad de, mediante un código QR, descargarse una aplicación que servirá para filtrar los mensajes que reciben en las redes sociales.
“Es perfecto para el bienestar mental de los jugadores. Saneará su mente. Todo el Mundo llegará más tranquilo a la pista. Estoy deseando conocer lo que piensan los jugadores”, aseguró la directora del torneo, Amelie Mauresmo.
Representantes de la empresa proponen a los jugadores la aplicación, cuya descarga es voluntaria.
Los más jóvenes parecen menos atraídos por la herramienta porque han crecido en el contexto de las redes sociales y saben mejor lo que pueden encontrarse en ellas.
Pero Bodyguard asegura que la protección puede ser útil para cualquiera, porque, lejos de crear un ambiente de censura, contribuye a que los jugadores puedan modular el nivel de crítica que están dispuestos a soportar.
Cada vez son más los deportistas que interactúan con los aficionados de forma directa, sin otros intermediarios, lo que abre la puerta a que, en algunos casos, las críticas o, incluso, las estafas puedan dañar a los jugadores.
El tenis es uno de los deportes más afectados por estas tendencias y su influencia mental puede ser mayor que en otros al ser un deporte individual, según los responsables de la aplicación.
Bodyguard ofrece también la posibilidad de contribuir a mejorar la relación entre los aficionados y los jugadores, y a las altas instancias les permite recolectar datos que pueden contribuir a mejorar la situación.
En este sentido, durante Roland Garros ofrecerán a los organizadores estadísticas diferentes, desde los tenistas más afectados a los tipos de acoso que pueden darse.
Además, en caso de que intervenga la justicia, también puede servir para identificar a los internautas que hayan cometido algún tipo de delito o que hayan distribuido mensajes de odio.
Por el momento, la aplicación se les propone de forma gratuita a los jugadores durante las 2 semanas del torneo más una suplementaria. A partir de ahí, aquellos que la consideren útil podrán seguir manteniéndola si pagan por tenerla.
Con información de EFE