Mazatlán, Sin (Reacción Informativa).- Era una tarde calurosa de 1969, el reloj marcaba las dos de la tarde, el termómetro 40° grados y el sol estaba en su punto más alto en Estación Naranjo, pueblo del municipio de Sinaloa de Leyva, cuando llegó al mundo un pequeño ser, que más tarde, se convertiría en una mujer poderosa, rebelde y con una fuerza abrazadora; Aleyda Rojo.
Yo la conocí en mis tiempos de estudiante, me la encontré en la Plazuela Machado, en Mazatlán, Sinaloa luego de que el destino trajera a mis manos uno de sus libros “Más frescas las tardes” una historia que dejó huella en mí ya que nunca pensé que por medio de los libros uno pudiera conectar con otras personas.
¿Quieres saber quién es Aleyda? Aquí te compartimos una entrevista exclusiva para Reacción Informativa.
¿Quién es Aleyda Rojo?
Es una escritora que nació en un pueblo, ahora vive en un puerto y realiza obra intensa.
¿Cómo es un día en la vida de una escritora?
Es un día de imaginación, de locura, es un día en el que no me bajo nunca de la nube, es un día en el que siempre estoy en contacto con mis personajes.
¿Cómo es escribir un libro?
Es la locura, es el corazón que se abre, es sentir una herida que no cierra, es mi sangre.
¿Qué es lo que te motiva a escribir?
Es un deseo de darle vida a seres que no tuvieron la oportunidad de manifestarse en su momento y que están flotando en el espacio en otra dimensión y creo que nosotros los escritores tenemos esa sensibilidad para captar esas voces que están flotando en el espacio y atraerlas para convertirlas en palabras.
Cuéntanos un poco acerca de tu más reciente libro “Chispas de un mismo fuego”
Es un libro de 13 cuentos, lo escribí en diez, doce años y es un libro donde todos los personajes hablan de algo sexual, una sexualidad oculta, una sexualidad de sombras y unas emociones que siempre están en el “sótano”. Es un libro muy apasionado y apasionante, desde que empieza hasta que se termina, cada cuento me llevo casi un año de escritura y de trabajo diario, dormí con el libro, me clavé la pluma y los lápices muchas veces en la noche porque despertaba con los manuscritos, por un lado.
¿Valió la pena tanto tiempo de espera para ver nacer este libro?
Yo creo que sí, porque es un libro intenso, a pesar de que se ve un libro tan compacto, tan chico de 100 páginas, no se dejen llevar por las apariencias, este libro es peligroso y los va a llevar a estados emocionales muy intensos, talvez llegan a sentir vergüenza de sí mismos.
¿Algún mensaje para las nuevas generaciones?
Los jóvenes siempre tienen mucho que decir y lo más importante es que se sienten a escribir y el deseo de la escritura los llevara de manera automática a la lectura, porque cuando tú empiezas a sacar lo que tienes quieres saber como lo hicieron otros y en esa búsqueda empiezas a ser atrapado por esa red que es la lectura, esa red de voces, de cerebros, de luces que es un libro, hay que entrar a escribir y eso los llevará a leer.
Si quieres conocer más de la escritora o adquirir su más reciente libro “Chispas de un mismo fuego” la encuentras todos los sábados en la Plazuela Machado de Mazatlán, Sinaloa.
