El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que no tenía conocimiento que el secretario de la Defensa Nacional, general Luis Crescencio Sandoval, haya hecho viajes de lujo al extranjero con cargo al erario, pero si la familia del alto mando los realizó cuestionó: ¿y qué? ¿Cuál es el problema?”.
En conferencia de prensa, el presidente López Obrador fue cuestionado por los viajes que realizó el titular de SEDENA con su familia en aviones militares y comerciales, en categoría premier a Estados Unidos y Europa, además de haberse hospedado en hoteles de lujo, según correos electrónicos dados a conocer por los hackers llamados Guacamayas .
“Sí, es parte de lo mismo, esa es información de la DEA o de cualquier otra agencia, segurísimo como hackearon el sistema de información de la Defensa, eso es Claudio X González con ellos.
- ¿Son reales los viajes?, se le insistió al Mandatario.
- “No sé, tampoco creo que dicen que estuvo 15 días, no, nunca ha estado el general (tanto tiempo fuera) que yo sepa” respondió.
- ¿Pero su familia?
- “A su familia a lo mejor sí, ¿y qué? ¿Cuál es el problema?”, reviró el titular del Ejecutivo.
El presidente López Obrador dijo que la filtración de esos correos electrónicos tienen como implicaciones el querer manchar a su gobierno, porque sus adversarios son unos calumniadores y siempre han actuado así.
Crescencio Sandoval hace viajes de lujo con todo y familia
Los viajes del general Luis Cresencio Sandoval González al extranjero son poco conocidos. Lejos de los reflectores, sin alardes, los viajes del secretario de la Defensa Nacional (Sedena) son viajes de “terciopelo”, como se dice en el argot militar: en jets del Ejército, hoteles de alta gama, comidas y cenas en buenos restaurantes, viáticos en suficiencia, visitas a museos y lugares emblemáticos de las ciudades visitadas.
Pero esos gustos no los disfruta en solitario. El general Sandoval suele viajar acompañado. Varias de las plazas de los jets del Ejército mexicano son ocupadas por su esposa, su hija, su hijo (un alto funcionario federal de inteligencia), su nuera, su pequeña nieta y a veces su consuegra.
Al secretario de la Defensa Nacional lo acompaña siempre, además, una célula de al menos 10 militares que atiende sus necesidades: ayudantes de campo, asistentes para él y para su esposa, jefe de seguridad, médico, enfermera, intérprete, además de los efectivos encargados de la avanzada.