Las construcciones de edificios en Mazatlán están dejando un rastro de contaminación que afecta a la Laguna del Camarón, especialmente con la acumulación de corcho blanco o unicel
Mazatlán, Sin (RI Noticias) .- En Mazatlán, la Laguna del Camarón, un tesoro ecológico, se enfrenta a un problema ambiental cada vez más evidente: la acumulación de residuos de unicel provenientes de las construcciones cercanas. Este material, aunque ligero y útil en la construcción, se convierte en un peligro cuando es arrastrado por el viento hacia la laguna.
El unicel, conocido científicamente como poliestireno expandido, no se degrada fácilmente, lo que significa que persiste en el ambiente, descomponiéndose en microplásticos que pueden ser confundidos con alimento por la fauna local, afectando así el ecosistema acuático y terrestre que depende de la laguna.
El profesor David Ocampo Peraza, director del Centro para la Educación Agrícola y Ambiental A.C. (CEAA MZT), explicó que este fenómeno no es nuevo. “Ya en años anteriores se ha denunciado que las constructoras no controlan el material que se vuela, lo que termina afectando a la laguna. Además de la imagen que da, las pequeñas partículas de unicel se confunden con las algas, y son consumidas por peces y aves, lo que perjudica su salud”, comentó.
“Una solución sería una campaña de saneamiento alrededor del cuerpo de agua. El año pasado, los Boy Scouts organizaron una limpieza que fue muy efectiva. Pero necesitamos más acciones coordinadas. La Dirección de Ecología debe trabajar junto con Obras Públicas y ciudadanos para realizar campañas de saneamiento. Además, es crucial una intervención de las autoridades hacia las constructoras y los negocios locales para controlar la dispersión de residuos.”
Este problema no solo refleja la falta de regulación en la gestión de residuos en las obras de construcción sino también una desconexión entre desarrollo urbano y conservación ambiental.
Ocampo, invita a la reflexión sobre las políticas actuales de construcción y cómo estás deben evolucionar para proteger nuestros recursos naturales. Señalando que una coordinación entre gobierno, empresas, y sociedad civil es esencial para avanzar hacia un desarrollo más sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
La contaminación de la Laguna del Camarón por unicel es un ejemplo claro de cómo la negligencia en la gestión de residuos puede tener consecuencias duraderas.
Es imperativo que todas las partes involucradas tomen conciencia y actúen para revertir y prevenir este daño ambiental, asegurando así la salud de este importante ecosistema para las generaciones futuras.