Durante toda la administración del expresidente Andrés Manuel López Obrador, el gobierno federal “simuló” otorgar recursos a la atención de desastres naturales; sin embargo, de acuerdo con las Cuentas Públicas e informes de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), año con año los fondos no se ejercían y eran devueltos a la Tesorería de la Federación (Tesofe).
Asimismo, muchas de estas devoluciones económicas se destinaron a las obras prioritarias del expresidente López Obrador, situación reconocida por propios legisladores de Morena.
Al inicio de la administración se eliminó el fideicomiso del Fondo de Desastres Naturales, que permitía acumular el dinero que año con año se le depositaba.
Solamente quedaron los programas Fondo de Desastres Naturales (Fonden) y Fondo de Prevención de Desastres Naturales (Fopreden), y los tres sumaban en 2019 una bolsa de 41 mil millones de pesos. Pero al finalizar la administración de López Obrador se quedaron con 13 mil 500 millones de pesos.
“La diferencia de 2018 a 2024 supera los 28 mil millones de pesos, eso da cuenta de que a lo largo de todo este sexenio el tema de atención y (…) prevención de desastres naturales no fue prioritario.
“El gobierno de Andrés Manuel López Obrador deja a un país que ya no está preparado para un desastre de grandes magnitudes que nos exija atención inmediata por parte del gobierno mexicano”, advirtió el diputado panista Saúl Hernández, quien fue integrante de la Comisión de Presupuesto durante la 65 Legislatura.
Un análisis de las Cuentas Públicas e informes trimestrales de Hacienda muestra que en 2018 existía el Fideicomiso del Fondo de Desastres Naturales, que permitía acumular el dinero que año con año se le depositaba. Dicho fideicomiso contaba con 16 mil 796 millones de pesos, mientras que el Fonden tenía 24 mil 644 millones y el Fondo de Prevención de Desastres Naturales tenía 531 millones, es decir, un monto total de 41 mil 440 millones.
Para 2020, el fideicomiso quedó extinto y los recursos acumulados en el Fonden y Fopreden eran de 27 mil millones de pesos; en 2021 se designó al Fonden una bolsa de 8 mil 727 millones 349 mil 813 pesos; sin embargo, no se gastó un solo peso de ese recurso y el dinero fue reintegrado en su totalidad a la Tesofe.
En 2022 ocurrió lo mismo: se avaló un presupuesto de 9 mil 54 millones 884 mil 831 pesos para el Fonden, pero como al final del año sólo se habían utilizado mil 697 millones 829 mil pesos, el resto se regresó a la Tesofe.
El Fondo de Prevención de Desastres Naturales corrió la misma suerte: se depositaron 400 millones de pesos en 2021 y 2022, pero al término de cada ejercicio fiscal se vaciaron los fondos y se transfirieron a la tesorería.
A inicios de 2023, el entonces diputado federal Daniel Gutiérrez Gutiérrez, quien integraba la Comisión de Presupuesto, confirmó que ese dinero estaba siendo utilizado para obras prioritarias del gobierno federal.
“Los recursos del Fonden que no se usan al término del ejercicio fiscal se han destinado a las inversiones públicas y productivas de nuestro país.
“Si algo necesitamos entender es que para que un país crezca se debe elevar la competitividad y la productividad, y lo que le falta al sur es que los grandes proyectos se terminen para que den los resultados que se esperan, por eso es que este dinero se ha utilizado para el Tren Interoceánico, el Tren Maya, [la refinería de] Dos Bocas, pero también para el [Tren] Interurbano del Estado de México y Ciudad de México, carreteras municipales y autopistas, y otras obras en diversos lugares de nuestro país”, dijo en entrevista.
Al término de 2023 se comprobó que la dinámica siguió siendo la misma: el Fonden pasó de tener 17 mil 156 millones de pesos aprobados en el PEF a 7 mil millones, pero al final del año no se ejercieron.
Los reportes financieros indican que ese año se destinaron más de 25 mil millones de pesos para atender desastres naturales a través del ramo 23; sin embargo, no dan detalles específicos en la materia.
Por ejemplo, la Secretaría de Hacienda reportó el gasto de mil 173 millones de pesos para la contratación del Seguro para Catástrofes 2023-2024 con cobertura para daños por fenómenos naturales; la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes dijo que se gastaron 2 mil 401 millones de pesos en “acciones de reconstrucción para sectores carretero-rural por eventos ocurridos en los años 2020, 2021 y 2022”, pero no explica de cuáles se trataron; la Sedatu, que erogó 81.3 millones de pesos en “acciones de reconstrucción por eventos ocurridos en los años 2017, 2018, 2019, 2020 y 2021”, y la Secretaría de Medio Ambiente, que gastó 582.3 millones “en acciones de reconstrucción para los sectores forestal por eventos ocurridos en los años 2017, 2019, 2020, 2021 y 2022”, entre otros.
Para 2024, los informes trimestrales de Hacienda revelan que al mes de junio la bolsa del Fonden se redujo de 17 mil 984 millones de pesos aprobados por la Cámara de Diputados a 13 mil 347 millones de pesos por las modificaciones al gasto, de los cuales, además, no se ha ejercido un solo peso.
En tanto, el Fopreden pasó de 228 millones de pesos al inicio del año a 125 millones, sin que hasta el momento se hayan gastado recursos de ese fondo, pues el “gasto pagado” se mantiene en cero pesos.
Lo anterior, mientras Acapulco se mantiene como zona de desastre, con reporte de 22 personas fallecidas por el impacto de John.